Notas al margen
David Fernández
Del cinismo de Sánchez a la torpeza de Feijóo
ES difícil que en un documento de carácter oficial se haga un análisis de situación sin que se echen las culpas de los problemas a un tercero. Mucho más complicado es que en las conclusiones aparezca un alto grado de autocrítica. El Patronato Provincial de Turismo de Huelva, en concreto, ha elaborado un extenso documento de carácter interno en el que apunta las líneas maestras que la promoción de la provincia debe seguir de ahora en adelante. Lo hace a partir de la siguiente conclusión: los agentes turísticos onubenses, públicos y privados, han venido actuando "sin ningún tipo de coordinación ni de visión global que propiciase un mayor impacto y retorno de las actuaciones emprendidas". "Junto a esto", añade el texto, "se localizó una dispersión de marcas que afectaban a una identificación clara de nuestro destino ante los distintos mercados". No es mal punto de partida.
Es innegable que Huelva padece las consecuencias de la falta de infraestructuras del transporte y que la inmensa mayoría de los turistas, con tiempo limitado para disfrutar de su ocio, exigen llegar a sus destinos de forma cómoda y rápida. Sin aeropuerto, sin líneas ferroviarias decentes y con una N-453 sin proyecto de desdoble, el turismo en Huelva se asfixia pese a que sus enormes posibilidades saltan a la vista. No en vano, un estudio del CES provincial, del que hoy damos cuenta en páginas interiores, indica que nuestras playas son el destino peninsular más alejado de Madrid teniendo en cuenta los tiempos de transporte.
Ante ello, los sectores implicados pueden emplear el tiempo en lamerse las heridas, hacer trampas al solitario para ocultar la realidad -contamos con medio millón de viajeros menos desde 2006- o arremangarse para superar esas dificultades. Además de buscar una marca turística común que identifique al destino con más nitidez, queda por delante profundizar en la calidad de la oferta; ampliar esta última hacia sectores como el turismo deportivo, gastronómico y de naturaleza; luchar contra una estacionalidad que lleva a cerrar muchos y buenos hoteles la mayor parte del año; ajustar la oferta a las necesidades de los viajeros, en vez de obcecarse en lo contrario, y aprovechar la Universidad de Huelva -donde tan buenos profesionales existen con reconocimiento internacional- como plataforma de investigación de los mercados y de mejora del destino.
En vísperas de que una amplia delegación onubense se desplace a Madrid para presentar la oferta de la provincia en Fitur, hay que recordar que tan importante como todo lo anteriormente citado es trabajar desde la unidad y el consenso, con generosidad y sin tratar de sacar tajada particular a costa del esfuerzo colectivo. No dejemos asignaturas pendientes.
También te puede interesar
Notas al margen
David Fernández
Del cinismo de Sánchez a la torpeza de Feijóo
Las dos orillas
José Joaquín León
Sumar tiene una gran culpa
Crónicas levantiscas
Feijóo y otros mártires del compás
Postdata
Rafael Padilla
Las verdades de Gates
Lo último