Falta de respeto

LE salió de dentro y definió de forma clara lo que en ocasiones se percibe a este lado de la A-49. Primeros movimientos para fichar a Chuli, consulta a un compañero hispalense y respuesta clara: "El Betis no va a pagar ese dinero por un futbolista del Huelva (lo de 'el Huelva' es otra batalla). Le dará 100.000 euros y un par de trofeos colombinos... ¿Qué se ha creído que es el Huelva?". Todo un lince. Al final fueron 600.000 y Ezequiel.

Cuando el miércoles saltó la noticia de los contactos del Betis con Sergi Barjuan reviví el episodio. Me pareció oírlo de nuevo en mi cabeza. "No tenemos entrenador pues vamos y nos traemos al del Huelva...". Que el Recreativo esté a las puertas del partido más importante en años o que la filtración pueda desestabilizar en el momento más inoportuno al club vecino importa poco. Que por 72 horas de espera se hubiese podido resolver con más elegancia, ¿para qué?

En el Nuevo Colombino están más que mosqueados con el Betis. Que el conjunto heliopolitano toque a Sergi Barjuan, o al menos suelte que lo ha hecho porque el origen de la noticia está en el Villamarín, es una deslealtad, siendo cortés con el calificativo elegido.

Luego se nos llena la boca con la hermandad y la fraternidad andaluza, pero falta el tiempo para menearle la silla al entrenador del otro a las puertas de su cita capital o alentar supuestas alineaciones indebidas tirando la piedra y escondiendo la mano río arriba.

Entiendo que si el Betis hubiese llegado con alguna opción al final de temporada no le hubiese hecho mucha gracia que algún equipo tocase a Rubén Castro o que el Villarriba sintiéndose superior hubiese tanteado a su entrenador sin respetar lo mucho que se jugaba. Pero como su liga casi terminó en febrero, no se dio el caso.

Por si fuera poco, encima el movimiento se realiza dando por hecho que el Recre no disputará la promoción de ascenso, con lo que la falta de respeto es visionaria. Propia de otro lince verdiblanco.