El veranillo del membrillo

LA traducción literal del título del cómic de esta semana sería Todo sucedió en un verano indio. En algunos países usan el término "verano indio" para describir esos días de principios de otoño donde parece que de pronto el verano va a regresar, que vuelve el calor y el buen tiempo, como en los mejores días de julio o agosto, para de pronto cambiar la luz y la temperatura y darnos cuenta de que el otoño avanza y en seguida se convertirá en invierno. Nosotros lo conocemos como "verano de San Miguel" o "veranillo del membrillo".

Cuando dos gigantes de la viñeta como los italianos Hugo Pratt y Milo Manara combinan su talento y su sensibilidad, el resultado es un clásico como Verano Indio (1986), obra que ofrece una visión del puritanismo, sus consecuencias y la hipocresía que le acompaña.

Verano Indio comienza con una secuencia narrada con silencios que relata cómo dos indios violan a la joven sobrina del reverendo, en unas páginas con una delicadeza y un pulso narrativo que define el porqué de la fama de sus dos autores.

Esto es sólo el comienzo: la brutalidad -sin abandonar la poesía- continúa en aumento hasta la batalla épica que decidirá el futuro de todos los protagonistas de la historia.

Los Lewis, maldecidos por sus convecinos de New Canaan a causa de un puritanismo hipócrita que castiga al que lo dice y no al que lo hace, salvan a la joven de las garras de los dos indios después de matarlos.

Estas dos muertes darán origen al conflicto entre blancos e indios, una venganza que se convierte en un círculo vicioso en el que todos tienen algo que perder.

Este cómic nos muestra el supuesto origen real del libro La letra escarlata (1850), de Nathaniel Hawtorne.

Verano Indio se desarrolla en un momento indeterminado entre 1650 y 1690, cuando el puritanismo intransigente de los llamados Peregrinos del Mayflower, que habían desembarcado en 1620 en la bahía de Cape Cod y fundado la ciudad de Plymouth, provocaba las primeras guerras con los indios abenaki.

Cuando comienza esta historia, los indios y los blancos de Massachusetts mantenían relaciones pacíficas. Ingleses y franceses se habían disputado la primacía en la costa sin involucrarlos directamente.

El poblado abenaki de Squando se hallaba separado por escasas millas de la aldea de New Canaan, dominada por los colonos puritanos. Se adivinaba ya la primera caza de brujas que tendría su culminación en 1692 en la cercana ciudad de Salem.

Es la primera vez que encontramos a Milo Manara dibujando un guión de Hugo Pratt, aunque repetirían en El gaucho (1991).

Hugo Pratt construye esta historia con el rigor habitual. Milo Manara la reviste con su gracia y su delicadeza características, con su dibujo suave y atractivo, con su toque erótico, con su humorismo y con su expresividad.

Entre ambos autores se produce una difícil simbiosis, una compenetración perfecta en la que sus estilos tan distintos, opuestos incluso, parecen fundirse. El resultado es una narrativa muy poética, a pesar de la violencia y la crueldad de la historia.

Individualmente y en distintos momentos, Pratt y Manara tienen dos puntos en común: ambos han expuesto sus obras en el Museo del Louvre y han ilustrado publicidad de perfumes.

Hugo Pratt (Italia, 1927-Suiza, 1995), fue un historietista italiano de origen sefardí, creador del personaje Corto Maltés.

Milo Manara (Italia, 1945) es considerado maestro del cómic erótico gracias a obras como El Clic (1984) y El perfume del invisible (1986). Entre sus modelos está la cantante Sabrina Salerno.

La próxima semana: Astérix y la Residencia de los Dioses, un álbum que ya en 1971 advertía de los peligros de la burbuja inmobiliaria.

VERANO INDIO 2003, Norma Editorial. Guión: Hugo Pratt. Dibujos: Milo Manara. Material original: Tutto ricominciò con un'estate indiana. 1986, Edizioni Milano Libri

Monitor del club de lectura de cómic

Marco Macías de la Biblioteca Pública Provincial de Huelva