El tren de la muerte

El tren de la muerte
El tren de la muerte

Multicines La Dehesa Islantilla, CineBox Aqualon Puerto Huelva, Cine Vip Lepe, El Condado Cinemas 7 y Al Andalus Punta Umbría.- T.O.: 'Unstoppable'.- Producción: Estados Unidos, 2010.- Duración: 101 minutos.- Dirección: Tony Scott.- Guión: Mark Bomback.- Fotografía: Ben Seresin.- Música: Harry Gregson-Williams.- Montaje: Robert Duffy y Chris Lebenzon.- Intérpretes: Denzel Washington, Chris Pine, Rosario Dawson, Kevin Dunn, Jessy Schram, T. J. Miller.

El tren ha sido en multitud de ocasiones protagonista de infinidad de películas o ha aparecido en ellas de una manera significativa y primordial. De hecho algunas de ellas lo llevan en el título. Ha sido y, como se ve, sigue siendo una de los ingenios mecánicos más cinematográficos que existen. No hay más que ver estas imponentes locomotoras que arrastran convoyes de ochocientos metros, treinta y tantos vagones a grandes velocidades por los caminos de hierro de los Estados Unidos.

Tony Scott, al que muchos le han añadido el maligno adjetivo del Scott malo, ya que se considera a su hermano Ridley como el bueno, ha dispuesto ese escenario espectacular de acción e incertidumbre, que nos presenta esta historia en la que un tren con vagones que contienen sustancias altamente inflamables, explosivas y contaminantes, discurre aceleradamente sólo sin conductores a través de un largo recorrido. Un descuido de sus responsables puso en marcha el convoy sin gobierno con riesgos para las poblaciones que cruza. Dos hombres, el jefe de tren, el joven Will Colson, y el veterano conductor, Frank Barnes, que dirigen el tren que podría colisionar con el convoy fugitivo, tratarán de detenerlo en su amenazador itinerario.

Imparable, que tuvo problemas para su realización por el elevado presupuesto, hasta el punto de que la productora pidió a Denzel Washington que rebajara sus estipendios de 20 millones de dólares, ha dispuesto una historia en la que, obviando su falta de originalidad -hace poco veíamos una nueva versión de Pelham 1, 2, 3 (1974), de Joseph Sargent, dirigida por el propio Tony Scott, Asalto al tren Pelham 123 (2009), protagonizada también por Denzel Washington y John Travolta-, aporta para absorber la máxima atención del espectador un cúmulo de acción trepidante de alternativas continuas y un dinamismo vibrante que deja sin respiro al público.

Tony Scott, sin entrar en un análisis más exigente, nos presenta una perspectiva narrativa que entretiene al espectador y sobre todo le presenta una historia provista de un montaje vertiginoso, apabullante, con una fotografía impresionante y con la aportación paralela de unos dramas personales, unidos a esa denuncia evidente sobre las responsabilidades de quienes dirigen y conducen estos colosos ferroviarios de un millón de toneladas rodantes, las negligencias, los excesos de confianza, los fallos humanos, las desavenencias matrimoniales y paternofiliales, los envilecimientos empresariales y a la vez los enormes medios para evitar en lo posible la catástrofe. Elementos de acción y dramatismo conjugados con amenidad en una narrativa absorbente.

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