Una pareja insólita

CineBox Aqualon Puerto Huelva.- Título original: 'Itouchables'.- Producción: Francia, 2011.- Duración: 115 minutos.- Dirección y guión: Eric Toledano y Olivier Nakache.- Fotografía: Mathieu Vadepied.- Música: Ludovico Einaudi.- Montaje: Dorian Rigal-Ansous.- Intérpretes: François Cluzet, Omar Sy, Audrey Felurot, Anne Le Ny, Clotilde Mollet, Alba Gaïa Bellugi, Cyril Mendy, Christian Ameri

El título no es lo más acertado, pero lo es mucho menos en la versión española, donde el plural se ha convertido en singular, porque tal vez los distribuidores españoles, siempre tan listos, han pensado que los espectadores pudieran confundirse con los famosos Intocables de Elliot Ness, aquella famosa película que dirigió en 1987 Brian de Palma. Como quiera que sea esta película ha sido todo un suceso memorable en las salas de Francia - la segunda producción francesa más vista en el país - y seguramente dado su éxito de público y crítica haya favorecido su proyección en España, donde no son muy habituales los títulos procedentes del vecino país.

Esta es realmente una historia extraordinaria que protagoniza una extraña pareja, Philippe y Driss. El primero es un rico aristócrata que ha sufrido un grave accidente de parapente y ha quedado tetrapléjico. Esto le obliga a desplazarse en silla de ruedas. Para que le lleve de un lado a otro y le atienda en todo, ha contratado como cuidador a un joven que ha salido recientemente de prisión y habita en un barrio del extrarradio de viviendas públicas. No parece la persona más indicada para tratar con el refinado Philippe, culto, exigente, de frases elegantes y aspecto distinguido, con lo que contrastan fuertemente los pantalones de chandal y la jerga callejera y vulgar de Driss, malhablado, provocador y entrometido. Inevitablemente chocan pero, condenados a entenderse, se iniciará entre ellos una amistad inconcebible y demencial, que, sin embargo, genera en ambos una increíble energía y solidaridad.

Parece a simple vista que Eric Toledano y Olivier Nakache, directores de esta película, han acertado con esa fórmula de éxito capaz de conquistar, a pesar de su peculiar chauvinismo, al difícil público francés. Lo han hecho desprendiéndose de argumentos fácilmente seductores para el espectador, aunque a veces surjan sentimentales evidentes. Pero hay en la historia, pese a la situación personal de los protagonistas, uno inmovilizado totalmente y el otro sufriendo el desempleo y el desarraigo personal, una corriente amable, un sentido del humor que proporciona al relato un clima de optimismo y comprensión, abriendo para ambos unos ámbitos antes desconocidos.

Inspirada en hechos reales, cuyos personajes auténticos aparecen al final de la película, Intocable, consigue una especial sutileza o ternura en el desarrollo de los acontecimientos, para exponer la superación de la pena y la compasión a través de unos sentimientos generosos, altruistas, sin dejar de tratar asuntos tan graves como la discapacidad, la marginalidad social, el racismo. Insisto: todo ello sin recurrir a efectos demasiados melodramáticos o a otras argucias moralistas, que son habituales en un cine demasiado empeñado en ejemplificar. Por otra parte el tratamiento de los personajes es admirable. Pero esto no tendría el mayor lucimiento sin la contribución excepcional de los dos actores protagonistas: François Cluzet y Omar Sy. Ideal para amantes de un cine social sin concesiones fáciles.