Cultura

La ley de toros extiende los 'correbous" en Cataluña

La Ley de regulación de las fiestas tradicionales con toros, aprobada por el Parlamento de Cataluña el pasado otoño, abre la posibilidad de que municipios de las Tierras del Ebro que habían perdido la tradición de los 'correbous' soliciten recuperar estos festejos. Muy extendidos en el sur de Cataluña, actualmente, 26 municipios o núcleos de las Tierras del Ebro celebran 'correbous' (toros sin muerte del animal que consta de seis modalidades, como el 'bou embolat' o el 'bou capllacat') durante sus fiestas mayores de verano, entre los meses de junio y septiembre, recoge el listado anexo a la ley. Entre esos municipios figuran Aldover, Alfara de Carles, Camarles, Deltebre, L'Aldea, L'Ampolla, Paüls, Roquetes, Tortosa (Els Reguers y Campredó), Xerta, Alcanar y Amposta. La normativa establece que "sólo se pueden autorizar" festejos taurinos en las localidades y las fechas en que tradicionalmente se han celebrado, pero abre la puerta a que poblaciones que habían perdido la tradición soliciten recuperar los festejos y a la ampliación del calendario de actos.

Para ello, los promotores han de aportar "los informes o las manifestaciones de instituciones, entidades o personas conocedoras de la historia y las tradiciones locales en que se acredite fehacientemente la tradición de la fiesta" en los últimos 60 años. El reglamento que debe concretar algunos puntos controvertidos de la ley, como el carácter "tradicional" y "excepcional" de los festejos, está previsto que se apruebe a finales de septiembre o principios de octubre, ha explicado a Efe el delegado del Gobierno de la Generalitat en las Tierras del Ebro, Xavier Pallarés.

El concejal de CiU en Sant Carles de la Rápita y presidente de la Agrupación de Peñas y Comisiones Taurinas de las Tierras del Ebro, Miquel Ferré, considera que la ley "reconoce una tradición", y critica a quienes, "sin haberlos visto nunca", denuncian que en los 'correbous' los animales son maltratados Asegura, que no se producirá un "aluvión de peticiones" de ayuntamientos, ya que han de demostrar que se trata de un municipio con tradición taurina. Un ejemplo es el núcleo de Campredó, que el 25 de junio se convirtió en el primer pueblo que celebró actos con toros fuera de las fechas tradicionales al demostrar que en la década de los sesenta se hacían "correbous" coincidiendo con San Juan.

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