El espíritu del mal

'SINISTER 2'

Cines Artesiete Holea Huelva.- Estados Unidos, 2015.- Título original: 'Sinister 2'.- Duración: 97 minutos.- Dirección: Ciarán Foy.- Guión: Scott Derrickson y C. Robert Cargill.- Fotografía: Amy Vincent.- Música: Tomandandy.- Montaje: Timothy Alverson, Ken Blackwell y Michael Trent.- Intérpretes: James Ransone, Shannyn Sossamon, Robert Daniel Sloan, Dartanian Sloan, Lea Coco, Take Ellington, John Beasley, Lucas Jade Zumann, Jaden Klein, Laila Haley

Como se deduce del título ésta es una secuela de la película Sinister que viéramos en 2012. Es otro de los éxitos del cine de terror que sumar a los muchos que está proporcionando el género, inagotable y bastante productivo en las taquillas. Vuelve con esta continuación el espíritu demoníaco del malvado Bughuul que inducía a los niños a asesinar a sus familias. Con él retornaba a la pantalla la casa siniestra que no puede faltar en este tipo de escalofriantes tramas. En el argumento de Sinister 2 la protagonista es otra familia aunque los hechos de aquella primera historia continúen.

A la nueva mansión rural en Illinois se mudan los gemelos de nueve años, Dylan y Zach Collins con su exageradamente protectora madre, la joven Courtney, que está tratando de conseguir el divorcio de su peligroso marido. Buscan un lugar lo bastante lejano del abusivo padre y esposo que los maltrataba para que no los encuentre. Ignoran que la nueva casa está señalada fatalmente por la muerte y los designios diabólicos del perverso Bughuul. Las pesadillas asaltan al pequeño Dylan. El antiguo oficial de la policía, So & So, sigue por su cuenta una investigación en torno a los sucesos y consecuencias de los misteriosos asesinatos cuyas pesquisas había iniciado Ellison Oswait, el periodista especializado en artículos de prensa y novelas sobre crímenes famosos, que ya conocimos en la película precedente. So & So está firmemente persuadido de que el nuevo hogar de los Collins será objetivo del maligno Bughuul.

Se dice popularmente que segundas partes nunca fueron buenas. En general y salvo contadas excepciones las secuelas del cine de terror nunca resultaron afortunadas. Hay toda una larga serie de ejemplos. Si Sinister no fue un ejemplo a seguir en este género cinematográfico, tan prolífico y tan presente en las carteleras de cualquier tiempo, esta continuación ha quedado a sus artífices bastante peor. Es más a cualquiera le puede parecer innecesario cual lo fueron muchas otras. No sólo no presenta novedades dignas de mención sino que en buen aparte se dedica a imitar o seguir fielmente lo que vimos antes. Diríamos, si hay algo que decir al respecto, que la película no hace más que insistir en los pocos momentos lúcidos que tenía la primera película intentando mejorarlos, pero ni esto consigue. Sigue entonces ese círculo concéntrico que tanto cultivan las películas de terror que vuelven una y otra vez, insistentemente, a los mismos motivos de inspiración. En resumen: absolutamente prescindible.

QUIROGA