Crítica de Cine

El antihéroe

'deadpool'

Multicines La Dehesa Islantilla, Cines Aqualon Puerto Huelva, CineVip Lepe, El Condado Cinemas 7, Al Andalus Punta Umbría y Cines Artesiete Holea Huelva.-Producción: Estados Unidos, 2016.- Título original: 'Deadpool'.- Duración: 107 minutos.- Dirección: Tim Miller.- Guión: Rhett Reese y Paul Wernick, basado en el cómic de Rob Liefeld y Fabian Nicieza.- Fotografía: Keng Sieng.- Música: Junkie XL.- Montaje: Julian Clarke.- Intérpretes: Ryan Reynolds, Morena Baccarin, Ed Skrein, T. J. Miller, Gina Carano, Brianna Hildebrand, Jed Rees, Stan Lee

Está visto y comprobado que los superhéroes de los cómics nunca mueren. Es que ni siquiera desfallecen. Por si alguno faltaba, aquí está este antihéroe, el menos convencional de la prolífica e inagotable editora Marvel, según dicen. Curiosamente, no sé en qué situación estará cuando se publique esta crítica, pero en sólo a una semana de su estreno se encaramó en el primer puesto de la lista de las películas más taquilleras, logrando, además, un elevado índice por copia. Nada menos que siete mil euros, el doble de El renacido (2015), un título que ha recobrado nuevos valores de aceptación pública tras lograr tres Oscar en la última entrega de los más preciados premios de Hollywood.

El director, Tim Miller, debutante como tal en esta película, ya frecuentó este género en diferentes cometidos como experto animador, creador de efectos especiales y ayudante de dirección en títulos muy diversos: X Men Orígenes: Lobezno (2009), de Gavin Hood; Scott Pilgrim contra elmundo (2010), de Edgar Wright y Thor: el mundo oscuro (2013), de Alan Taylor , entre otras, tras el fracaso en la que también diseñó lo efectos visuales de Linterna verde (2011), de Martin Campbell, no se pensaba que volviera a este tipo de cine. Pero su reencuentro con esta especialidad cinematográfica no puede ser más sorprendente, recurriendo de una manera espectacular y un tanto iconoclasta a esos lugares comunes que suelen aureolar las películas de superhéroes y vengadores más o menos populares que tanto han abundado últimamente.

Tenemos entonces al actor canadiense Ryan Reynolds, al que ya viéramos en la mencionada Linterna verde, encarnando al antiguo agente de las Fuerzas Especiales reconvertido en el mercenario Wade Wilson. Sometido a un inhumano y rudo experimento se ve dotado de unos poderes curativos de asombrosa aceleración y eficacia, lo cual lo transforma en una especie de alter ego de Deadpool. Con esta nueva personalidad sus habilidades -"con los que los hombres suelen soñar", le dicen- y poderes se combinan con un singular sentido del humor. En esta situación todo su empeño estará dirigido contra el individuo que pretende su destrucción y que estuvo a punto de acabar con su vida.

Todo propende en esta hábil y desenfadada realización de Tim Miller a la comedia o más bien a la parodia del cine de superhéroes de una manera transgresora o si quieren irreverente. Y lo hace con elementos que sin ser brillantes son muy efectivos en su intención y logros. Desde la caricatura de sí mismo que emprende el protagonista, Ryan Reynolds, hasta esos ágiles diálogos, jugosos, ocurrentes, chispeantes y malhablados en muchas ocasiones, la realización convencerá por igual a los adoradores de este género como a cualquier espectador que sepa valorar en sus justos términos el aire audaz de la historia, plagada de referencias a muchas de las películas de este tipo.

Con un argumento imaginativo, un guión sin grandes alardes ni pretensiones, un recargado y violento arrumaco en las escenas de acción, Deadpool es en la cartelera actual un espectáculo imprescindible para amantes del cine de superhéroes dispuestos a la broma.

Quiroga

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