Cultura

Sonsoles consigue eclipsar a la mismísima Carla Bruni

La ausencia de Sonsoles Espinosa en la reunión paralela de las consortes en la cumbre del G-20 celebrada en Londres ha sido recogida por varias cabeceras internacionales, por consolidarse como una de las esposas más esperadas.

La mujer de Jose Luis Rodríguez Zapatero no acudió finalmente a la cumbre pese a que el rotativo británico, The Guardian, adelantaba el estilismo de la española como uno de los más arriesgados y acertados. Sin embargo, muy en la línea de Espinosa, esta vez no permitió las comparaciones pertinentes, como finalmente si ha sucedido con el encuentro en Estrasburgo de Carla Bruni con Michelle Obama, en lo que han denominado "duelo de titanes" para comprobar cuál de las dos llevaba mejor los zapatos planos- pues ambas descartan el uso habitual de zapatos de tacón para no destacar más que sus respectivos maridos - y salvando las distancias, cuál estaría a la altura de la mismísima Jakie Kennedy y sería capaz de ensombrecer la figura de su esposo.

Debido a la esperada comparecencia de la consorte española, desde Moncloa recuerdan que Sonsoles "no es muy asidua a este tipo de actos" y que prefiere mantener su vida al margen del cargo que ocupa su marido, además de que tenía "otras actividades pendientes", pues la consorte acaba de concluir una de sus tournées musicales, pues ha regresado hace pocos días del estreno en el teatro Châtelet de París, Las hadas de Richard Wagner, y muy probablemente desee quedarse a cargo de sus dos hijas, Laura y Alba.

La expectación que ha levantado esta mujer sin pretensiones y que prefiere pasar desapercibida ha sido alabada por los rotativos norteamericanos que incluso advierten a Michelle Obama su nefasta decisión de vestuario para la cumbre, The Huffington Post, critica los tres errores de la mujer de Barack Obama en su encuentro con la Reina Isabel II -vestuario demasiado informal, cardigans calificados como "cutres" y el corte de las faldas poco favorecedor, además del cuestionado abrazo que las televisiones norteamericanas han reproducido cientos de veces a cámara lenta para averiguar quién de las dos es la primera que se salta el estricto protocolo británico que insiste en "no tocar a la Reina"- e invita a la primera dama que se deje aconsejar por Sonsoles Espinosa, a quien cataloga como una de las cinco mujeres más elegantes del panorama europeo.

The Guardian insiste que Sonsoles está muy a la altura de Carla Bruni, ex modelo de profesión y cantante, "Sonsoles sabe muy bien qué ponerse. Aunque el protocolo sea estricto, lo acompaña con un buen corte de pelo y una pieza de joyería que muestre su personalidad. Puede ser fotografiada al lado de Penélope Cruz y no desmerecer", concluye la cabecera británica.

Desde que Zapatero alcanzó la presidencia, su mujer se puso en manos de Elena Benarroch, gran a miga de Felipe González e Isabel Preysler, la estilista y diseñadora que ha sabido destacar sus virtudes físicas, pues a sus 47 años conserva un físico espectacular y además con sus 175 centímetros de estatura puede permitirse el lujo de acudir a actos tan célebres como la boda de los Príncipes de Asturias en zapato semi plano y ser una de las protagonistas de la alfombra. Su corte de pelo a lo garçon y su indumentaria siempre discreta pero favorecedora destaca su elegancia innata, algo reconocido en su círculo cercano "ella es elegante por dentro y por fuera, su actitud ante la vida es elegante, eso es lo importante".

Tras las comparaciones de los medios por las coincidencias con la esposa de Nicolas Sarkozy, subrayan su pasión por la música aunque la consorte francesa posea un estilo más en la línea de cantautora y haya lanzado varios cedés mientras que la española es soprano de ópera y canta en los coros de RTVE. Además de que ambas conserven un físico envidiable , también la francesa ha dedicado gran parte de su vida a explotarlo en su faceta como modelo, sin embargo Sonsoles es capaz de lucir sin pretensiones atrevidos modelos en los escasos actos oficiales a los que acude, además de que carece de la ambición en el terreno político de la anterior consorte española, Ana Botella, pese a estar licenciada en Derecho, ya que su mayor prioridad es la familia.

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