José Valladolid Rebollo, Pepe la Nora, Nace en San Juan del Puerto (Huelva) el 7 septiembre 1903, fallece el 4 marzo 1983. Su afición al flamenco lo hereda de su madre, Leonora Rebollo, alosnera conocida como La Nora, que cantaba muy bien los fandangos de su tierra.

Pepe tenía un hermano mayor que él, llamado Curro, buen aficionado e intérprete del cante flamenco conocido como Curro La Nora, por lo que Pepe empezó a cantar con el nombre de Pepe El Noro. Ambos hermanos, en su juventud, se dedican a las tareas agrícolas en la finca de su familia, que alternan con su afición al flamenco con actuaciones en fiestas, romerías y reuniones flamencas.

Así mataban ese gusanillo flamenco que llevaban dentro, a la vez que se sacaban unas pesetillas y aumentaban sus conocimientos en este arte. Desgraciadamente Curro fallece muy joven, en el año 1942, por lo que a partir de estas fecha Pepe se hace llamar Pepe La Nora, nombre con el que se le conocería hasta su fallecimiento.

La afición de Pepe desde su juventud es tal, que en una ocasión fueron a su casa a buscarlo a las cinco de la mañana para ir a una fiesta en Alcalá de Guadaíra (Sevilla), donde cantaba Joaquín el de La Paula. Sin pensarlo, se levantó para marchar hasta la ciudad vecina a escuchar al célebre cantaor, para incorporarse al trabajo después en el campo sin apenas dormir.

El cantaor sanjuanero inició su carrera junto a su hermano Curro, que falleció de forma prematura

Los hermanos La Nora efectuaban todas sus actuaciones cantando juntos. Participaron en muchas fiestas y reuniones flamencas para personas y casas de cierto poder económico, que podían costearlas y celebrarlas, algo muy normal en estos años, para disfrutar el flamenco. También participaban en algunos tablaos, colmaos o espectáculos que se celebraban en alguna ferias de capitales y pueblos de cierta importancia.

Los de La Nora fueron requeridos en las más importantes fiestas y reuniones flamencas por la popularidad adquirida en nuestra provincia. Esta notoriedad traspasó fronteras hasta que les llamaron desde Mairena del Alcor para participar en un festival flamenco. Allí compartieron escenario nada menos que con Manuel Torre y también actuó un niño con pantalones cortos conocido como Niño Rafael, que sería con más años Antonio Mairena. El pequeño artista sorprendió a los hermanos por cómo cantaba.

En esta fecha, en San Juan del Puerto existía un entrañable lugar llamado El Jardín de Suárez, que organizaba grandes fiestas y espectáculos flamencos. En este escenario se reunía la flor y nata de los artistas flamencos de Huelva, sin faltar los de La Nora, que serían lo que hoy podríamos llamar los puntales del fandango de Huelva, como han sido Pepe Rebollo, Paco Isidro, Antonio Rengel, Pepe La Nora, Pérez de Guzmán y El Comía, que aportaron sus nombres y apellidos a los diversos estilos de fandangos de nuestra tierra.

El arte de Pepe La Nora traspasó las fronteras de Huelva para dar realce y expandir el fandango de su tierra

Hoy podemos presumir de tenerlo como Patrimonio Cultural y pasear orgullosos en todos los ámbitos y manifestaciones flamencas, toda vez que el fandango está considerado Bien de Interés Cultural, publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, de fecha 5 abril 2011.

El año 1929 Curro y Pepe La Nora, con motivo de la Exposición Iberoamericana de Sevilla, efectúan su primera grabación con la casa discográfica Regal acompañados a la guitarra por Niño Ricardo, que empezaba a destacar. Pepe cantó fandangos de Huelva, tarantas, malagueñas y seguiriyas, y Curro por fandangos de Huelva, soleares, seguiriyas y malagueñas, de gran aceptación en los medios flamencos. Por la grabación cobraron mil pesetas cada uno, una cantidad importante en estos años.

En Sevilla gozaron de bastante popularidad y fueron muy admirados por todos los que le escucharon por su forma y estilo en sus cantes, de manera especial por su paisano Antonio Rengel, con quien compartieron fiestas en Casa de Pepe Pinto en la Campana.

Actuaron en la feria de abril en la popular caseta El 77 además de en otros tablaos y salones de la Avenida de Hércules y Plaza del Duque. Fueron invitados a cantar delante del rey Alfonso XIII, asimismo actuaron con los grandes artistas de la época, Vallejo, Niño Gloria, Centeno, Cepero, Tomás Pavón y su hermana Pastora, en diversos lugares de la capital de La Giralda, en la que dejaron un gran sabor de boca en los aficionados que le escucharon, por el duende y flamenquismo con los que interpretaban sus cantes.

Destacaron de manera especial en los inigualables fandangos de nuestra tierra, que hicieron que este palo se empezara a conocer y popularizar en el mundo flamenco, con la aportación de los cantaores onubenses antes citados y otros que fueron apareciendo en el firmamento flamenco de Huelva y provincia.

En la romería del Rocío, asisten invitados por el hermano mayor de la Hermandad de Huelva a postrarse a los pies de la Reina de Las Marismas y asistieron a hermandades y a fiestas en casas de muchos amigos rocieros amantes del arte flamenco en la aldea. Allí deleitaron a los asistentes de Almonte, de donde procedía un miembro importante de su familia, su tía Anita Valladolid, que fue camarista de la Virgen. Los hermanos fueron muy queridos y admirados y cuenta con muchos seguidores.

Pepe compartió reuniones y fiestas con su gran amigo y gran cantaor don José Pérez de Guzmán, creador de un estilo de fandango que lleva su nombre. En los años 1950, Pepe de La Nora fue una importante figura del flamenco y por ello se le solicitaba en las mejores fiestas privadas de Andalucía. En el año 1953 le invitaron junto a su hijo Pepe Briones al cumpleaños del ilustre caballero don José Tejero, celebrado en su residencia de Torrearenillas (La Rábida), al que asistieron ilustrísimas personalidades de toda España.