Jesús Cayuela: la plástica de la música

Jesús Cayuela.
Jesús Cayuela.

24 de julio 2011 - 05:00

Hoy llega hasta nosotros una persona entrañable, capacitado para dar durante tantos años de profesión, experiencias de las más grandes ocurridas en nuestra provincia. Su historia familiar le ha marcado profundamente, ya que su padre estudió música, pero terminada la guerra y con una parca situación económica, ingresó en la Guardia Civil. De esta curiosa manera, fue un guardia civil que al mismo tiempo ejercía de organista del pueblo a donde lo destinaban.

Comienza a estudiar música a los 11 años, en el colegio interno donde estudiaba. Posteriormente emprenderá su formación reglada en el Conservatorio de Sevilla, para seguir especializándose en multitud de cursos sobre música de cámara, composición, etc.

Jesús recuerda que después le tocó vivir experiencias musicales muy diversas, a caballo entre la música folk -lo normal a final de los 70-, los grupos de Fusión con el Jazz y con el Pop con excelentes compañeros de viaje, músicos onubenses de amplia trayectoria y buen hacer, como por ejemplo Pepe Roca, Alvaro Girón, Antonio Coronel, Antonio Esperón. etc. También recuerda su paso por Alameda, donde estuvo algunos años.

En su recorrido profesional hay un poco de todo. Sobre todo ha trabajado en producciones discográficas y realizando arreglos para infinidad de compañeros como Carlos Cano, Enrique Morente, José Mercé, Carmen Linares, Arcangel, Lucrecia, Manolo Tena, Mónica Molina, etc., por tener que resumir, pero nos confiaba que con todos los grandes artistas con los que ha trabajado, lo ha hecho gusto y les estará eternamente agradecido de por vida por haber pensado en él. De los últimos trabajos que ha realizado discográficamente están los discos Ruido de José Mercé, Coplas de Dyango - donde lo nominaron con un Premio Grammy Latino en el 2009 en el apartado de Mejor Productor) y Personaje Raro de Manuel Lombo, donde arregló y grabó con la Orquesta Sinfónica de Bratislava, en Eslovaquia.

Actualmente se ha estrenado la película El vuelo del tren, de Paco Torres, donde ha compuesto la banda sonora. Ahora mismo está realizando un proyecto, ya acabado, de grabación para Tele 5 de temas propios de Música Sinfónica grabados con la Orquesta Sinfónica de Bratislava, la Filarmónica de Praga y la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla. Sigue realizando bastante música para TV, y preparando un proyecto precioso que concluirá con un trabajo discográfico con sus propias ideas musicales para regalárselo a compañeros y amigos.

Tratando de temas presentes, asegura que el estado de la música pasa en estos momentos por la tiranía inculta del mercado, es decir, por la contaminación vulgar del dinero y de las radio formulas que siguen pensando que el ser humano es un imbécil, nada más lejos de la realidad. Es el mismo tipo de indignación que siente el pueblo con la política en general. Simplemente mantiene que los responsables de "no hacer nada", por lo menos en el campo de la música, que trabajen y se sientan cansados al final del día por haber intentado con todas sus fuerzas hacerlo bien, o eso o que dejen su puesto a quienes realmente quieren luchar por esta ciencia del oído y el sentimiento que es la música; piensa que afortunadamente el cambio está ocurriendo, lento pero está pasando.

Piensa que no es que por sistema que se tengan que hacer más cosas, porque ya tenemos la experiencias de estos años atrás de bonanza económica donde había dinero para multitud de actividades, pero la solución no es la cantidad, sino más bien la búsqueda de calidad. En religión se habla de "ganar almas", en política se habla de "ganar votos" pero creo que lo más inteligente sería "ganar ciudadanos preparados y sensibles", de esta manera saldríamos ganando todos.

Nos comenta que es fundamental que como músicos, evolucionemos constantemente y no perder la oportunidad, por prejuicios y limitaciones mentales, en mezclarnos con otras culturas y otros pensamientos a todos los niveles. Esta puede ser la única forma en la que las razas renuevan su sangre y sus ideas, sobreviviendo así. Este tipo de modelo es necesario también para la gestión cultural y musical o nos veremos relegados a estar tirados en un sofá con un mando a distancia en las manos, lo que él denomina como estado vegetativo.

La cultura y la Música dependen de la actitud personal de cada artista y cada responsable de éste ramo, si el sentido personal es bueno seguramente lo que sigue es bueno, trabajando mucho, con ilusión, con la formación tan necesaria, la seriedad pertinente y por supuesto que salgan de nuestras cabezas las cosas inútiles como perder más de 10 minutos de tu vida pensando en que coche te vas a comprar o que camisa para estar más guapo o interesante para los demás. Nuestra mente tiene que viajar a otro sitio, sobre todo a las cosas sencillas y poco pretenciosas. Así estaremos más guapos por dentro.

En cuanto a sus planes de futuro, aspira a que la vida le de la suerte primordial para poder vivir algunos años más, disfrutando de lo que le rodea, la Música, la familia y los buenos amigos, y luchas por conseguir tener consigo mismo y los con demás, un estado cada vez más armónico. Si quieren conocer más cosas sobre nuestro músico de hoy, pasen por su espacio web: www.jesuscayuela.com

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