No hay mes de octubre sin esta cita musical ineludible en Isla Cristina. Ni los tiempos de la crisis, muy duros con la cultura, han podido con el Festival Coral del Atlántico, estandarte en la provincia. Este año, si no hubiera llegado antes, alcanza la madurez total con su trigésima edición. Es un año muy especial y, sin posibilidades de grandes alardes, se apuesta por la cercanía. La de las cuatro agrupaciones existentes en la localidad isleña y la de las invitadas que completan el cartel. No por ello la celebración es menor. Es el canto a la evolución del paso de los años, a la generación de cultura musical en la provincia, y a la plenitud de un evento que presume de ser el más relevante de su género en Andalucía.

Pocas cosas cambian, y las novedades sólo mejoran. De nuevo la iglesia parroquial de Los Dolores, en pleno corazón isleño, es el escenario magno para la cita, que se concentra en tres días de fin de semana, de viernes a domingo, del día 14 al 16 próximos.

El carácter integrador es único, como siempre: puertas abiertas para todos los públicos, actuaciones que se escapan hasta la calle, en una invitación a la participación y un programa diseñado para tirar de la afición cercana. Porque cuatro de las ocho agrupaciones invitadas son locales, a las que acompañan dos más de la provincia onubense, otra de la sevillana y una de la vecina región lusa del Alentejo.

Ésta última, como destacó en la presentación de ayer el presidente de la comisión organizadora, Francisco González, es la que "proporciona el carácter internacional" que otros años fue nota muy destacada. Pero, más que eso, el Grupo Coral Os Arraianos de Vila Verde de Ficalho, representa uno de los grandes valores culturales de Portugal: el canto alentejano, reconocido en 2014 por la Unesco Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, sólo dos años después del fado. Esta agrupación testimonio de la tradición rural de la zona, está programada el día de cierre, el domingo 16 a las 12:00, en una actuación "itinerante", en plena calle, que acabará junto al Templete de la Música, junto a la parroquia de Los Dolores.

El broche del festival llegará por la noche, a las 20:30, ante el altar, con la Asociación Cultural Villa de Paterna del Campo, dirigida por el maestro Jesús Becerra, y el Orfeón y Escolanía de Huelva, del maestro Vicente Ballester, según detalló Francisco González.

Antes, el viernes 14, abrirán la trigésima edición a las 21:00 la Polifónica de Tomares (Sevilla) y la Coral Polifónica de Isla Cristina. Y el sábado, a la misma hora, las tres agrupaciones isleñas restantes: el Coro de Voces Blancas, la Coral Juvenil Isaac Cueto Burgos y la Coral Polifónica Padre Mirabent.

"Debemos agradecer especialmente a los directores de las corales isleñas que hayan sido parte fundamental en el sostenimiento de este festival: Vicente Sanchís, fundador con la Coral Polifónica , y Aurelio Jara, por mantener el espíritu que ha convertido a Isla en referente", apuntó González.

Otra pata fundamental para llegar sano a las 30 ediciones es la Diputación de Huelva, fiel desde el principio, "que va a seguir apoyando el festival mientras se celebre, por su categoría y su interés". "Los amantes de la música deben conocerlo, más allá de este género, porque es único", aseguró el diputado de la Costa, Salvador Gómez.