Confesaba Juan Pablo Castel, antihéroe de El túnel, que los ciegos eran "fríos, húmedos y silenciosos, como las víboras". Ernesto Sabato recupera este temor en Informe sobre ciegos, episodio autónomo de Sobre héroes y tumbas que Libros del Zorro Rojo reedita en un volumen con ilustraciones de Luis Scafati. "¿Cuándo empezó esto que ahora va a terminar con mi asesinato?", se pregunta Fernando Vidal Olmos, el protagonista de esta particular odisea a los infiernos; un hombre atormentado que, como Castel, vive alienado de la realidad y se ve rodeado de peligros, persecuciones y muerte en una hipotética secta de ciegos, que controla cada aspecto del mundo y de la vida.

Este amenazador clan de invidentes planea, en el cerebro de Vidal Olmos, un complot a gran escala contra las personas que sí pueden ver, si bien al enfrentarlos el protagonista asume que su batalla está perdida de antemano, por lo que elabora a modo de testimonio un informe que detalla su lucha y persecución, texto firmado con la impronta de un hombre desquiciado y derrotado. A lo largo de doscientas páginas, ilustradas a carboncillo con imágenes tenebrosas que recrean los tortuosos recovecos de una mente enferma, Vidal Olmos huye de su realidad en un viaje exterior e interior en el que Sabato recorre el camino habitual de una personalidad que se deteriora hasta la locura en un final tan abierto como poco prometedor para su protagonista.

El propio Juan Pablo Castel aparece mencionado en la novela, cuando Vidal Olmos se hace con una crónica que el protagonista de El túnel escribe desde el manicomio tras el asesinato de María Iribarne, un documento que corrobora las peores sospechas del protagonista al comprobar que su homólogo Castel reconoce haber tenido siempre "prevención" hacia los ciegos. Scafati (Argentina, 1947), se considera "marcado" desde su infancia por este episodio libre de Sobre héroes y tumbas.