El historiador José Manuel Cuenca Toribio analiza la cristalización del marxismo en España en su nueva obra, un ensayo publicado por la editorial Almuzara que desgrana cómo ese pensamiento se acomodó de forma progresiva en el ideario cultural español, con especial énfasis en la segunda mitad del pasado siglo. La editorial recuerda que a partir del triunfo de la revolución en Rusia, "el marxismo adquirió la categoría de mito político e ideológico, con predominio de lo primero en la mayoría de los territorios, y se expandió como aurora de una nueva humanidad". En 1968 el pensamiento materialista ya se había instalado en los sectores intelectuales más dinámicos de España.

El ensayo, titulado Marx en España. El marxismo en la cultura española del siglo XX, introduce las líneas generales de cómo entraron en España las principales tesis del materialismo dialéctico, el método histórico de Karl Marx, para luego centrarse en su propagación después de la Guerra Civil y en la plenitud del franquismo. Cuenca Toribio explicó que poco a poco las tesis del marxismo "se fueron incubando en la Universidad, en las editoriales, y de ahí a los medios de comunicación, de manera lenta pero inflexiblemente hasta desplazar casi por entero el modelo tradicional, que estaba basado especialmente en las doctrinas de Menéndez Pelayo y en la Institución Libre de Enseñanza".

El catedrático de Historia Contemporánea Universal y de España de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Córdoba (UCO) señaló que en España desde hace tiempo prevalece un modelo progresista marxista, que es "el que marca las pautas en el cine, el teatro, los libros, la enseñanza, en la Universidad...". Se trata, apuntó Cuenca Toribio, de la suma de ambos modelos. El primero venía de los países anglosajones, "donde el marxismo no tenía cabida y donde el progresismo se basaba sólo en una transformación social y la sustitución de la mentalidad católica por una laica". Sin embargo, "en Europa, donde el comunismo echó muchas raíces, ese modelo se acrecentó con el comunista, la lucha de clases, la dictadura del proletariado, el materialismo como canon de todo lo existente".

Ese modelo triunfó en la España del franquismo, tanto que, cuando Franco murió, "su régimen era ideológicamente hueco en cuanto a que la ideología nacional católica había casi desaparecido y la Iglesia, que había sido uno de los principales bastiones de ese modelo, casi no tenía ningún representante". Hoy en día, aclaró el historiador, el viejo modelo cultural tradicional "está semi vigente en algunas instituciones" pero no con la proyección del marxista.

Este sistema de pensamiento se propagó por el país a pesar de la represión y las estrictas normas del régimen debido al capitalismo. Cuenca Toribio explicó que "en España siempre se ha vendido más en los sectores progresistas y de izquierdas". Las editoriales, cuyos consejos de administración "estaban compuestos por altos capitalistas, querían vender pero lo tenían que hacer propagando las tesis de la nueva cultura, el feminismo, el ecologismo, etc, y eso lo hicieron, en general aunque no siempre, a través de instrumentos capitalistas al servicio de una mentalidad anticapitalista".

Ya en 1968 un elevado porcentaje de la producción bibliográfica de las principales editoriales del país -sobre todo las radicadas en Barcelona, que ostentaba la capitalidad del libro español- acogían en sus equipos a profesores represaliados y a expulsados de sus claustros debido a su participación en las huelgas gestadas en el tardofranquismo.

Así, editoriales controladas por los principales bancos del país o en manos de empresarios de notoria ascendencia franquista tenían depositada toda su confianza en consejos, sociedades de redactores y cuadros intelectuales de creencias radicalmente opuestas a las de sus propietarios.

El ensayo llega hasta la actualidad; de hecho, el historiador explica que Podemos surge de un grupo de discípulos de Antonio Elorza y Santos Juliá. "Algunos hetedoroxos han salido, pero sus maestros son de la escuela de historiadores de Madrid, los politólogos", indicó. Incluso manifestó que "el tema está tan de actualidad que a lo mejor tenemos un presidente del Gobierno surgido de esto". Es decir, casi todas las tesis de nuestros días tienen un matiz marxista, "por eso el libro es clave para entender el presente".

José Manuel Cuenca Toribio (nacido en Sevilla en 1939) es autor de una ingente obra entre la que destacan algunos libros como Historia General de Andalucía, Teorías de Andalucía, Semblanzas andaluzas (galería de retratos), Sociedad y clero en la España del siglo XIX, Pueblos y gentes de Córdoba, Catolicismo español y catolicismo europeo contemporáneo, La oratoria parlamentaria española. Una antología o Momentos y figuras cordobesas, entre otros .