Bardem conquista Cannes y la Palma de Oro lleva esperanza a Tailandia

El realizador Apichatpong Weerasethakul se confirma como nueva voz del cine internacional · El español alza 'ex aequo' el premio a mejor actor, que también recae en el italiano Elio Germano · Juliette Binoche, premiada

Javier Bardem, pletórico, sonríe con su galardón en Cannes al Mejor Actor, que comparte con el italiao Elio Germano.
Javier Bardem, pletórico, sonríe con su galardón en Cannes al Mejor Actor, que comparte con el italiao Elio Germano.
M. L Climent Mascarell (Dpa) · Agencias / Cannes

24 de mayo 2010 - 05:00

Cuesta pronunciar el nombre del director tailandés Apichatpong Weerasethakul, pero habrá que aprenderlo. Está considerado uno de los valores emergentes del cine internacional, sobre todo después de alzarse ayer con la Palma de Oro en el Festival de Cannes con la película Uncle Boonmee Who Can Recall his Past Lives, que traduce como El tío Boonmee que se acuerda de sus vidas anteriores. Una velada, la de anoche, que también tuvo como protagonista a Javier Bardem, premiado por su papel en Biutiful.

Cofinanciada por la productora española Eddie Saeta Films que dirige Luis Miñarro (también a concurso con El extraño caso de Angélica, de Manoel de Oliveira), esta singular y onírica propuesta encumbra al director tailandés, que despuntó en 2002 cuando se alzó con el premio de la sección Un Certain Regard por Blissfully Yours. Uncle Boonmee... se centra en la vida de un hombre próximo a la muerte que viaja al norte de Tailandia, su región natal, donde se encuentra con personas de su vida ya fallecidas.

Apichatpong agradeció el galardón sin olvidar a sus compatriotas: "Esta recompensa significa mucho para mí como cineasta", declaró al recoger el premio. Y agregó: "Tailandia necesita esperanza. La situación es muy grave y estamos muy deprimidos", en alusión a los tensos momentos que atraviesa su país, donde el Gobierno anunció ayer una nueva prórroga del toque de queda en Bangkok y en 23 provincias. "Espero que la noticia de que Tailandia ha ganado aquí un premio cultural suponga un poco de aire fresco para calmar la situación", agregó el cineasta.

Y si Tailandia dio la sorpresa en Cannes, lo de Bardem estaba cantando por su papel de delicuente en el inframundo de la inmigración en la Barcelona que retrata Biutiful, el último trabajo del mexicano González Iñárritu. El actor, pletórico, dedicó el premio a su director y por primera vez mencionó en un acto público a su pareja, que estaba en la platea. "Comparto esta alegría con mi amiga, mi compañera y mi amor, Penélope [Cruz]: te debo muchas cosas y te quiero mucho", palabras que provocaron las lágrimas de la madrileña.

Distinguido ya con el Oscar, dos Copas Volpi y cuatro Goyas, Bardem recibió el premio ex aequo con el italiano Elio Germano, que da vida a un obrero de la construcción en La nostra vita, de Daniele Luchetti. Germano puso una nota política al señalar: "Quiero dedicar este premio a Italia y a los italianos que hacen todo lo que está en su poder por hacer de nuestro país un país mejor a pesar de nuestros gobernantes". También Juliette Binoche realizó una intervención política al recoger el premio a la mejor actuación femenina con Copie Conforme, del iraní Abbas Kiarostami y sacar un papel con el nombre de Jafar Panahi, director iraní encarcelado en su país.

El jurado presidido por Tim Burton concedió el Gran Premio a otra de las películas que más gustó esta edición: Des hommes et des dieux, de Xavier Beauvois. Sin embargo, una de las favoritas, la británica Another Year, de Mike Leigh, se fue de vacío.

stats