Hace seis años que a Víctor Pulido le ronda la idea en la cabeza. Nació su hija Noa y le inspiró. La vio dormir por las noches y empezó a dibujar en un cuaderno, convertido ahora en el tratado de uno de sus proyectos más ambiciosos. Es Imago, extraído de ese mundo de ensoñación particular del vientre materno, de un imaginario poblado de insectos que mutan para alcanzar un estado de esplendor. El que ahora trata de convertir la crisálida en una majestuosa libélula emperador.

Desde que presentó Imago hace dos años en Huelva, el artista onubense ya dejó claro que se trataba de un proyecto vivo y que aspiraba a materializar una de las etapas más deseadas: colocar su escultura de la libélula en el Campus de El Carmen de la Universidad.

Hace un par de años trabajó en un prototipo articulado, de 8 metros de envergadura y 7 de largo, aproximadamente. Lo ha llevado a Sevilla, a Málaga y a las propias instalaciones de la Onubense, en la sala Cantero Cuadrado, donde presentó Imago en una espectacular exposición en 2015. Ahora quiere que el círculo se cierre y vuelva con todo su esplendor, a la Facultad de Ciencias del Trabajo, al lado de la Avenida de Andalucía, posada junto al escudo universitario para convertirse en un nuevo icono para la UHU.

Su objetivo fue siempre ese. Al menos una de las esculturas que replicaran ese prototipo en metal debía acabar en la Universidad. Y lo hará el próximo mes de junio, si todo sale según los planes, con el brillo del acero inoxidable para iluminar el campus. Sólo le separan de su objetivo 5.000 euros. Es la parte prosaica del proyecto. Es el presupuesto para su fabricación, transporte y colocación, para lo que ahora pide ayuda a través de una campaña de financiación colectiva por internet.

En septiembre escenificó el mito de la caverna en La Gruta de las Maravillas, llevando allí su prototipo alado para grabar un vídeo promocional que refleja en parte su proyecto. Ahora espera que cale en el público en los 39 días que restan para reunir el dinero, tras empezar ayer el plazo en la web Verkami.

Cualquiera puede realizar aportaciones, de 15 euros a 1.000; ocho modalidades en total, cada una con sus recompensas, entre ellas, incluso, acuarelas originales de la serie Imago. Toda una oportunidad para contribuir a la producción de un artista local, para una obra que perdurará en la ciudad y para coleccionar arte en casa.