Las renovables ya suponen dos tercios de la potencia instalada en España, aunque la generación se estanca
Análisis del primer trimestre 2025
Andalucía encabeza la generación solar fotovoltaica con 2.300 GWh, pero su producción total renovable descendió un 3,6%

España refuerza su capacidad con un crecimiento récord impulsado por la energía solar fotovoltaica, aunque la producción energética verde se ve lastrada por la baja aportación eólica e hidráulica.
El avance de las energías renovables sigue consolidándose como una de las grandes transformaciones del sistema eléctrico nacional. A cierre del primer trimestre de 2025, las fuentes limpias han alcanzado los 86.747 megavatios (MW) de potencia instalada, lo que representa ya el 66,5% del total del parque generador, prácticamente el doble que las fuentes no renovables (43.778 MW), según los últimos datos del Observatorio de Energías Renovables, elaborado por Opina 360 a partir de estadísticas de Redeia.
Este incremento no solo consolida la posición de las renovables como motor de la transición energética en España, sino que marca un nuevo máximo histórico en su crecimiento: solo en el último año han sumado 7.931 MW, lo que representa una subida del 10,1% interanual. El 84% de esta nueva capacidad correspondió a energía solar fotovoltaica, que añade 6.637 MW, creciendo un 24,5%. La energía eólica, por su parte, sumó 1.296 MW, un 4,2% más.
Crece la potencia, pero no la generación
Sin embargo, ese crecimiento de potencia instalada no se ha traducido en un aumento equivalente de generación eléctrica. En el primer trimestre, la producción renovable apenas subió un 0,1% interanual, situándose en 39.692 gigavatios hora (GWh), debido sobre todo al mal comportamiento del viento y la menor aportación hidráulica. La generación eólica cayó un 4% y la hidráulica un 3%, mientras que la solar fotovoltaica creció con fuerza, un 13,1%, marcando récord para un primer trimestre.
Como consecuencia, las renovables pierden algo de peso en el mix eléctrico. Aunque siguen siendo mayoritarias, su participación en la generación total bajó al 57%, 2,2 puntos menos que el año anterior. En términos de cobertura de la demanda, la electricidad verde supuso el 61% del consumo nacional, dos puntos y medio por debajo de 2024.
Andalucía, Castilla y León, y Extremadura, a la cabeza
Al analizar la distribución de la potencia renovable, cuatro comunidades autónomas concentran ya el 62% de toda la potencia renovable del país: Castilla y León (17,5%), Andalucía (16,1%), Castilla-La Mancha (15,8%) y Extremadura (13%). Todas ellas han experimentado un fuerte crecimiento interanual, destacando especialmente Andalucía, que lidera en términos absolutos al incorporar 2.373 MW de potencia verde en solo un año.
No obstante, el comportamiento por comunidades presenta contrastes. Aunque Andalucía encabeza la generación solar fotovoltaica con 2.300 GWh, su producción total renovable descendió un 3,6% debido al desplome de la generación eólica (-29,6%). En Castilla y León, en cambio, la producción creció un 8,9%, gracias al buen rendimiento de la hidráulica y la eólica.
Solar fotovoltaica: protagonista absoluta
La solar fotovoltaica se confirma como el motor de la expansión renovable en España. Representa ya el 38,9% de toda la potencia renovable instalada, por delante de la eólica (37,2%), y genera el 22% del total de energía verde producida en el trimestre. Su crecimiento ha sido particularmente intenso en Castilla y León, Castilla-La Mancha, Andalucía y Extremadura.
En contraste, tecnologías como la hidráulica y la cogeneración siguen perdiendo peso. La hidráulica mantiene su segunda posición en producción renovable, pero con tendencia descendente, y la cogeneración continúa en retroceso tanto en potencia instalada como en generación.
¿Un frenazo coyuntural?
El informe subraya que el estancamiento de la generación renovable es, en parte, un efecto coyuntural derivado de las condiciones meteorológicas. La escasez de viento durante el otoño e invierno ha afectado a la producción eólica, y las lluvias de marzo no han bastado para recuperar la aportación hidráulica. Mientras tanto, la generación no renovable aumentó un 10% interanual, con subidas significativas en las centrales nucleares (+12,3%), ciclos combinados (+15,3%) e incluso carbón (+23,2%).
Aun así, la tendencia estructural es clara: España continúa su avance hacia un sistema energético dominado por fuentes limpias, aunque el desafío ahora se traslada a asegurar una generación estable y eficiente, mejorar el almacenamiento energético y reforzar las interconexiones y la red de distribución.
También te puede interesar