La barriada de Los Rosales de la capital onubense vuelve a acoger, por octavo año consecutivo, el Campamento de Verano Aguas de Huelva, que se desarrolla en las instalaciones de la asociación de vecinos, una iniciativa que cuenta con la colaboración de Cruz Roja y en la que cincuenta de sus voluntarios participan en el proyecto.

Desde el 9 de julio y hasta la última semana de agosto, treinta niños de edades comprendidas entre los 6 y los 14 años, pasan sus mañanas en la asociación para realizar juegos y talleres y hacer su verano más divertido y ameno. De lunes a viernes, desde las 10:00 hasta las 14:00, los menores realizan actividades lúdicas, deportivas, culturales y educativas acompañados de los voluntarios de Cruz Roja.

Una treintena de niños pasan la mañana en las instalaciones de la asociación vecinal

A los niños se les proporcionan en el campamento, de forma diaria, el desayuno y el almuerzo en el comedor, que se habilita en la asociación vecinal y además los chavales vuelven a casa con la merienda preparada.

Ayer por la mañana visitaron la escuela de verano la concejala de Políticas Sociales e Igualdad del Ayuntamiento de la capital onubense, Alicia Narciso, el presidente de Cruz Roja en Huelva, Juan José Blanco, y el director gerente de Aguas de Huelva, Marcos Martín. En el transcurso de la visita se repartieron entre los niños una mochila con diversos regalos y los chavales realizaron una coreografía de El Rey León.

Narciso destacó la importancia de éste y otros campamentos que se organizan todos los veranos, en cuanto que garantizan la alimentación de los menores, dentro de las actividades que se realizan en los campus durante la época estival. "El campamento de Los Rosales busca poco a poco garantizar el trabajo comunitario con los jóvenes y con la infancia. Es uno de los barrios más transformados socialmente en los últimos años", afirmó la concejal.

Por su parte, el presidente de Cruz Roja manifestó que "es importante que tanto los niños como sus familiares reciban una alimentación sana durante los meses de verano y éste es uno de los objetivos del campamento urbano". Blanco declaró sentirse muy orgulloso de que el número de voluntarios casi doble el de niños, ya que esto es un claro indicador de la solidaridad de los onubenses.

"Estar aquí un año más es un placer, es una de las acciones más bonitas del año. Nuestra aportación es garantizar la alimentación de estos niños durante los meses de verano", explicó Martín. El director gerente de Aguas de Huelva agradeció la colaboración de los voluntarios de Cruz Roja, "este trabajo no sería posible sin su compromiso ni dedicación".

La presidenta de la asociación de vecinos, Charo Tristancho, que también estuvo ayer presente, destacó el gran trabajo que realizan los monitores y el cariño y amabilidad con los que tratan a los niños. "Es un campamento estupendo, tenemos una juventud completamente dedicada a esto, no tengo palabras para resaltar la labor que realizan cada año".

Gracias a iniciativas como éstas, muchos niños de la capital disfrutan y viven un verano diferente y divertido en el que aprenden valores tan fundamentales como la cooperación y el compañerismo.