La tuna y la religiosidad popular en Huelva
El vínculo de las tres tunas universitarias de Huelva con la Inmaculada Concepción y otras manifestaciones religiosas viene de muchos años y tiene este día 8 una jornada muy especial
Los bomberos colocan la ofrenda de flores a la Inmaculada en Huelva
Existe una fuerte vinculación entre el dogma concepcionista de la Virgen María y la institución de la tuna universitaria, sobre todo en las ciudades de Sevilla y Huelva. Esta estrecha relación, se extiende a otras manifestaciones cristianas, con un papel importante de los tunos como protagonistas y agentes activos en el hecho religioso.
El sello de la Universidad de Huelva podría pasar por ser un logotipo esquemático, moderno. Sin embargo, el origen del emblema está cargado de Historia y singularidad. Se trata de una reproducción de un sello notarial, estampado en la primera página de la escritura pública datada en 1605, por la que la Orden de los Mercedarios adquiere y funda un convento en la conocida Vega Larga de Huelva, actual Plaza de la Merced. La estampación del sello, fuera realizada a mano alzada por el propio escribano público Cristóbal de Bilbao, de ahí las pequeñas imperfecciones en líneas y circunferencias, y también la explicación del ligero desvío de uno de los radios, que lo hace peculiar y diferente al resto de escudos de otras universidades.
En pleno corazón de Huelva se sitúa la Parroquia de la Purísima Concepción, considerada desde su levantamiento en 1515 el primer templo del orbe cristiano consagrado a la advocación de la Inmaculada Concepción.
Desde 2004, la ciudad cuenta, además, con un Monumento dedicado a la Inmaculada Concepción. Las tres tunas de Huelva, Empresariales, Derecho y Politécnica, apoyan desde el primer momento esta iniciativa, y a la comisión que se creó ad hoc, ya que ésta era, precisamente, una de sus aspiraciones.
El monumento fue realizado por el imaginero Elías Rodríguez Picón, sufragado por iniciativa popular y construido por el arquitecto Carlos Barranco. Otra de las principales advocaciones marianas de Huelva es la de la Virgen de la Esperanza, de la Hermandad de San Francisco.
El 4 de junio de 1994, con motivo del I Centenario Fundacional de la Hermandad, el Ayuntamiento de Huelva impuso la Medalla de Oro de la Ciudad, a la imagen de la Esperanza. En la víspera de ese día, la Tuna de Empresariales, tuna decana de la ciudad, acudió a la llamada de la Hermandad para rendir un homenaje musical y floral a la Sagrada Imagen.
Algunos años más tarde, la propia imagen es coronada canónicamente por el entonces obispo de la ciudad de Huelva, D. Ignacio Noguer Carmona, en ceremonia celebrada el 3 de junio de 2000. En esta ocasión concurren en la tarde de la víspera de la memorable jornada las tres tunas al completo de la ciudad, Empresariales, Derecho y Politécnica.
Por último, el 4 de octubre de 2014, en el 75 aniversario de la Hechura de la Imagen de la Virgen de la Esperanza, de nuevo, las tunas de Huelva se dan cita en esta importante efemérides de la Semana Santa de Huelva.
La Virgen de las Flores
Una de las tradiciones que caracterizan a la Tuna Politécnica, está relacionada con una escultura en piedra caliza blanca de aproximadamente 1,70 de altura, una Virgen bajo la advocación de la Virgen de la Fe. Con apariencia de Inmaculada, la imagen se encuentra expuesta al culto en unos jardines exteriores del Campus de la Rábida, y es conocida con el nombre de la Virgen de las Flores por el entorno floral donde se encuentra.
Los tunos de la Politécnica acuden a la imagen para dar gracias por la protección recibida durante todo el año. De hecho, se podría considerar que la ceremonia de entrada oficial en la Tuna Politécnica termina con el rito del nuevo tuno arrodillado frente a la imagen, cantando en solitario la canción de La Rábida mientras que el resto de compañeros le acompañan y arropan en este emotivo momento para el recién becado.
‘La Rábida’, himno
En 1990, Javier Gómez Felipe, La Rubia, tuno de Empresariales de Huelva , compone la canción La Rábida. En ese año, Empresariales aún se encontraba en el Campus de la Rábida, ya que no fue hasta octubre de 1991 cuando se inauguró el actual Campus de la Merced. El autor se inspira en aquel singular entorno, el Monasterio franciscano, la columnata del IV centenario y la marisma… para recordar algún amor perdido entre libros, rosetones y pinares del entorno rabideño.
Enseguida, la canción se convierte en un verdadero himno, no solo para la Tuna de Empresariales sino para el resto de las tunas de Huelva, que también la hacen suya.
Otra de las canciones de tuna dedicada a la ciudad de Huelva, es la que compuso Juan Carlos Riquelme, Alf, de la Tuna de Económicas y Empresariales de Murcia. Recuerdos de Huelva es un canto a la ciudad onubense, a sus calles y monumentos, a su gastronomía, a la belleza y simpatía de sus mujeres...
Existen otras canciones que también son emblemas de la ciudad, como los pasodobles Mi Huelva tiene una Ría, o Huelvana primorosa, de Primitivo Lázaro. Sin embargo, La Rábida y Recuerdos de Huelva son canciones genuinamente de tuna compuestas por tunos para ser cantadas en la tuna.
Huelva, su Universidad y sus tres tunas, testigos de una Historia enraizada en la Religiosidad Popular de una ciudad Mariana y Cofrade por antonomasia.
¡Viva Huelva!
¡ Aúpa Tuna!
Leopoldo Ignacio Sánchez Pallarés. Lindo Mirador, Tuna de Empresariales de Huelva. Vinum laetificat cor hominis.
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