La problemática en Huelva con las comunicaciones vía ferrocarril vienen de lejos. Ya a principios de diciembre de 1997, la Federación Provincial de Transportes y Telecomunicaciones de la Unión General de Trabajadores denunció, y así lo recogió Huelva Información, que, desde el 29 de septiembre, trenes automotores que prestaban un servicio en la provincia de Huelva fueron retirados del servicio para llevarlos a otras comunidades autónomas y "aquí han traído en su lugar otros pendientes de ser reparados y reformados, que de cuatro motores que tienen circulan con tres y a veces hasta dos".

El sindicato ferroviario de UGT calificó de "vergüenza nacional" que se llevaran los trenes que estaban en buen estado de Huelva para traer hasta aquí "lo que no quieren en otros lugares". Indicó que "tenemos que pensar que desde muchos ámbitos existen intereses en hundir el ferrocarril en Huelva y en este mismo saco debemos meter a Renfe con la UN de Regionales al frente y a los políticos de Huelva, que como su alcalde, Pedro Rodríguez, sólo sirve para hacer anuncios grandilocuentes sin reparar en solucionar los verdaderos problemas del ferrocarril en nuestra provincia".

Desde la Diputación Provincial de Huelva y ayuntamientos de la provincia se reclamaba mayores inversiones en las líneas férreas de Huelva.