"El trasvase no empieza por la estupidez y mala leche del Gobierno"

El trasvase del Condado, la obra que esperan los agricultores de la comarca para garantizar el agua superficial en el entorno de Doñana, está en el limbo "por la estupidez y mala leche del Gobierno de España". La expresión es del vicesecretario general del PSOE-A, Mario Jiménez, quien aseveraba ayer que "por un pequeño papel" no se puede ejecutar una obra de 17 millones de euros.

La frase llega tras una semana de polémica en torno a los riegos del Condado por la petición de una amnistía para los pozos ilegales por parte de los socialistas, de la mano del secretario general del PSOE de Huelva, Ignacio Caraballo, en primer lugar, y después del propio Jiménez, quien criticó que el Gobierno "da instrucciones a la Fiscalía y al Seprona para perseguir esa realidad". Estas palabras han devuelto a la actualidad el problema de la falta de agua superficial para las alrededor de 14.000 hectáreas (según los cálculos de la comunidad de regantes del Fresno) que existen en el entorno de Doñana, la mayor parte regadas con pozos (legales o no). Para dar solución a esa escasez de líquido se planteó hace varios años el denominado trasvase al Condado, la transferencia de 4,9 hectómetros cúbicos de agua de la Cuenca del Guadiana a la del Guadalquivir.

A esa obra se refería ayer Jiménez para criticar que la falta de ese "pequeño papel", en referencia a la resolución de exención de la Declaración de Impacto Ambiental, provoca que la obra no pueda comenzar "y en cuestión de meses podemos perder miles de millones de pesetas". La actuación tiene un coste de 17 millones de euros, el 70% de ellos procedentes de fondos Feder, de ahí la advertencia de que es posible perder presupuesto. Y lleva comprometida desde el año 2004 (fue promesa electoral socialista) y aprobada por el Gobierno central desde 2008; el retraso, por tanto, viene de lejos. Al Ministerio de Medio Ambiente llegó en agosto de 2011.

Con la vuelta al Gobierno del PP, se convierte de nuevo en caballo de batalla del PSOE, junto a otras infraestructuras que serán reivindicadas en las enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado. El AVE, el desdoble de la N-435 o la presa de Alcolea serán centro de las enmiendas socialistas para la provincia, bajo la premisa de que con crisis o sin ella "las grandes infraestructuras deben ser atendidas". Son las eternas asignaturas pendientes, dos aún sobre el papel y una esperando el inicio de las obras desde 2008, aunque, según Jiménez, "estaban a un buen ritmo de ejecución y desde que ha llegado el PP al Gobierno han desaparecido del mapa".

El socialista respondió además a las peticiones del PP sobre la inclusión de una serie de actuaciones en los presupuestos de la Junta, que serán presentados próximamente. "Independientemente de a quien correspondan las infraestructuras habrá que trabajar para que salgan adelante", remarcó el socialista, quien reclamó "un poco más de honradez" en las reivindicaciones del PP. "Me sorprende que presenten un decálogo y se olviden de lo fundamental de esta provincia", criticó, considerando que "eso son trampas de niño chico". "Yo veo infantilizado al PP en nuestra provincia", apostilló.