Los farmacéuticos de los hospitales de Huelva fueron héroes a la sombra durante la pandemia de coronavirus. Se adaptaron de forma inmediata al nuevo escenario, reestructurando su actividad y dando prioridad a las tareas de adquisición, conservación y distribución de medicamentos.

El confinamiento decretado por el Gobierno central trajo consigo un paso al frente de la telefarmacia, entendida como la atención farmacéutica a distancia con el consiguiente envío de los medicamentos a un punto cercano al paciente.

A este respecto, la farmacéutica del hospital Infanta Elena y vocal de la Sociedad Andaluza de Farmacia Hospitalaria (SAFH), Mercedes Romero, recuerda la “constante preocupación” de los boticarios porque los medicamentos llegasen a los pacientes. Para ello, se organizaba la distribución de la medicación para que las personas pudiesen recogerla en sus centros de salud o en las farmacias más cercanas a sus hogares. En este sentido, Alonso explica que “la telefarmacia se hacía ya desde antes de la pandemia, pero tuvimos que potenciarla para evitar que los pacientes tuviesen que venir a los centros hospitalarios, pues para ellos era un riesgo, además de una dificultad para los que residían en zonas más alejadas”.

En este punto, la vocal de la SAFH reconoce la “solidaridad” de diferentes asociaciones que, voluntariamente, comenzaron a distribuir medicamentos entre los pacientes correspondientes.

De otro lado, la pandemia se tradujo también en un “impulso” en la coordinación entre profesionales y entre hospitales, dado que el contacto era “permanente” para intercambiar información relativa a los medicamentos que funcionaban, explica Mercedes Romero. De este modo, los farmacéuticos de Huelva se enriquecían de los boticarios de otros puntos de la geografía nacional, al tiempo que les hacían llegar los tratamientos más positivos de la provincia onubense, “siempre con las medicinas autorizadas por el Gobierno central”.

La Covid-19 derivó en “un esfuerzo titánico”, pero también trajo consigo un “sentimiento de familia” entre todos los profesionales de las farmacias de los hospitales onubenses, quienes unieron esfuerzos para conseguir que todos los pacientes pudiesen acceder a la medicación necesaria para una evolución favorable. “Nos dejamos el alma y estamos muy contentos por todo lo que conseguimos juntos”, finaliza la vocal de la SAFH.