"Las tasas, según la ley, sirven para pagar la justicia gratuita, pero no es así"

El debate durante el transcurso de la celebración del Foro Gerardo Rojas encontró dos polos muy marcados dependiendo de la afinidad política del invitado o de su simple pertenencia a un partido u otro. La disparidad de criterios, manifestada en un interesante y cordial encuentro dialéctico que se mantuvo durante todo el almuerzo, mostró una brecha más profunda, al margen de en lo concerniente a las responsabilidades relativas a la construcción de la Ciudad de la Justicia, cuando se abordó el tema de las tasas judiciales instauradas por el actual Ejecutivo. Aquí no hubo medias tintas y los extremos quedaron personificados con las opiniones del presidente provincial del Partido Popular, Manuel Andrés González, y con el parecer del portavoz socialista en el Ayuntamiento de Huelva, Gabriel Cruz.

Para el primero, la ley de tasas "castiga a quien tiene más posibilidades económicas y protege a quienes tienen menos recursos", manifestó el presidente del PP en Huelva. "Me parece incoherente criticar esto y que no se permita a los procuradores y abogados desempeñar su labor por los impagos que están sufriendo", criticó.

Para Gabriel Cruz, sin embargo, "la justicia gratuita es la garantía de acceso para quien no tiene recursos y las tasas, como concepto, me parecen indecentes", expresó tajante.

Juan José Domínguez, decano del Colegio de Abogados de Huelva, también mostró su contrariedad por la implantación de las tasas judiciales, argumentando que "se fundamentan en algo absurdo", expresó. "Las tasas judiciales se pusieron en marcha basándose en que se iban a incrementar las asistencias de justicia gratuita, pero las personas que están en el borde de las posibilidades no pueden establecer un procedimiento porque no se lo pueden permitir", explicó, mientras señalaba que "la Ley tiene la culpa".

El mismo consejero de Justicia e Interior, Emilio de Llera, invitado especial en la edición de ayer del Foro Gerardo Rojas, se manifestó contrario a la existencia de las tasas: "Las tasas judiciales, según la ley, es lo que se dedicará a pagar la justicia gratuita, pero no es así", afirmó. Y esto, además, está teniendo consecuencias sobre el propio desarrollo de los procesos judiciales, ya de por sí afectados por una lentitud extrema que todos los presentes coincidieron en señalar.

Una de las causas, al margen de los defectos de funcionamiento y de la existencia de una Justicia "propia del siglo XIX", se advierte, de forma más reciente, en la aplicación de las referidas tasas. "La gente huye de la vía civil porque tiene tasas, de forma que se están criminalizando cuestiones como los impagos o los incumplimientos contractuales, porque la gente, para solucionarlos, acude a la vía penal, que no tiene tasas", explicó.

Una de las soluciones propuestas para paliar la acumulación de procesos por esta vía es la mediación y el arbitraje. "La mediación y el arbitraje funcionan", señaló el consejero. "Estamos divulgándolo como otro modo de alcanzar soluciones sobre la base del diálogo", explicó el titular de Justicia, que recuerda la puesta en marcha del proyecto Eirene de la Unión Europea, al tiempo que recuerda que la falta de medios alcanza a esta administración hasta el punto de que "tampoco hay recursos para establecer la cultura de la mediación, aunque estamos divulgándolo", afirmó.