"Mi reto es abrir la Guardia Civil a los ciudadanos"

-¿Cuándo supo que quería ser guardia civil?

-Desde pequeño. Cuando era un chavalín ya me encantaba ayudar a la gente. Y encontré el medio de hacerlo a través de la Guardia Civil, que no sólo me proporciona los medios para hacerlo sino que, encima, me paga por ello, con lo cual estoy encantado.

-¿Tenía algún referente en el Cuerpo?

-Soy el primero de mi familia. Es curioso pero es así.

-Llegó a Huelva en enero pero estuvo en Isla Cristina cuatro años. ¿Cómo fue su estancia allí?

-Como bien dice, hace 30 años llegué de teniente a Isla Cristina como jefe de Línea, con competencias en Isla Cristina, Ayamonte, Lepe y Villablanca. Eran mis zonas de trabajo. Fue un momento de mi vida muy importante porque, por primera vez, tuve contacto directo con los ciudadanos. Tenga en cuenta que era mi segundo destino, después de estar la Academia de Guardias de Úbeda-Baeza, donde pasé de alumno a profesor. Le tengo un cariño especial a ese destino, a Isla Cristina, porque considero que allí me formé profesionalmente y empecé a coger la experiencia fundamental para trabajar en este mundo.

-Dice que le gusta el contacto con la gente, lo que tal vez conlleva más responsabilidad que estar detrás.

-Sin duda. A mi me gustó ser profesor, pero realmente en aquella época de mi vida echaba en falta tener experiencia para transmitírsela a los alumnos. No he vuelto a ser profesor pero me gustó y ahora, con el bagaje que tengo, creo que sería muy interesante.

-¿Cuál es su principal reto?

-Abrir la Guardia Civil a los ciudadanos, que nos conozcan realmente y que, a través de sus representantes a todos lo niveles -autoridades o cualquier tipo de asociación o institución- nos conozcan y, en la medida de lo posible, colaborar con ellos para sumar en seguridad.

-¿Cómo se logra este objetivo?

-En el día a día. Me faltan horas porque me encanta mi trabajo y también me encanta reunirme con la gente. No es perder el tiempo, sino todo lo contrario. Yo creo mucho en las personas y creo que las personas, si quieren, se entienden hablando, de forma que es fundamental sentarse y coordinar esfuerzos. Y luego, por supuesto, hay que hacer un seguimiento dentro de esa coordinación y pensar siempre que, sin duda, se puede hacer mejor.

-¿Alguna espinita en su amplia trayectoria?

-La verdad es que no tengo ninguna, sinceramente. Para mí ha sido muy gratificante estar en todos los destinos por los que he pasado. De todos me he ido con una sensación de dejar a un montón de gente maja, tanto dentro del Cuerpo como fuera. Cada vez que he ido a otro sitio me he encontrado fenomenal, como me ocurre al volver a Huelva donde, tanto dentro como fuera de la Guardia Civil he tenido una acogida fabulosa.

-¿Qué es lo que más le gusta de su trabajo?

-Estar al servicio de los ciudadanos. Me falta tiempo para hacer todo lo que quiero. Mi tiempo es mi familia y mi trabajo, mi trabajo y mi familia. Pero también me gusta el deporte, un partido de tenis de vez en cuando me viene bien. En cuanto a las aficiones, tengo un problema: Me gusta todo, así que tengo que tener cuidado y no probar algunos deportes como el golf, que requiere muchísimas horas de dedicación. También me gusta la fotografía, leer o esquiar. De todo.