Los responsables médicos niegan que favorezcan a Ortopedia Gordillo

Los jefes de Rehabilitación y Traumatología del Juan Ramón y el de Gestión y Personal del Infanta Elena aseguran al juez que ningún facultativo ha recibido regalos de la empresa

Fachada del establecimiento central de Ortopedia Gordillo, en la calle Doctor Juan Nicolás Márquez Domínguez de Huelva capital.
Fachada del establecimiento central de Ortopedia Gordillo, en la calle Doctor Juan Nicolás Márquez Domínguez de Huelva capital.
Raquel Rendón Huelva

06 de octubre 2014 - 01:00

No les consta que ningún médico haya realizado una maniobra ilegal para favorecer a Ortopedia Gordillo en detrimento de la actividad comercial del resto de profesionales del sector que presta servicio a los hospitales onubenses de forma ordenada y a través de un turno de guardias. Es el argumento que mantuvieron los jefes de los servicios de Rehabilitación y Traumatología del Juan Ramón Jiménez y el responsable de Gestión y Personal del Infanta Elena el pasado 11 de septiembre ante el titular del Juzgado de Instrucción 2 de Huelva, quien investiga la posible existencia de una trama sanitaria que supuestamente permite a la ortopedia monopolizar las ventas en los centros hospitalarios onubenses, un asunto por el que están imputados el propietario de Ortopedia Gordillo, F.G.C., y dos de sus comerciales, M.J.G.M. y M.M.G.

Huelva Información ha tenido acceso a las declaraciones como testigos de los responsables médicos, en las que reiteran que no tienen conocimiento de que ni ellos ni ningún otro facultativo haya tenido algún trato de favor con la mercantil señalada.

A preguntas de la acusación particular -que ejercen en bloque varios negocios del sector-, la jefa de Rehabilitación del Juan Ramón Jiménez asegura que "no sabe por qué el 80% de las recetas" del centro han sido atendidas por Gordillo, señalando que "nunca he recomendado a nadie que vaya ni nadie de mi servicio", pero que "es una ortopedia que tiene mucha publicidad y que los pacientes están satisfechos con la atención que reciben, que tiene exposición amplia y que allí tienen los productos que se pueden probar", la misma línea en la que apunta el jefe de Gestión y Personal del Infanta, quien indicó ante el magistrado que "tiene un buen servicio, es rápido y atiende bien, pero nadie del hospital lo recomienda".

El jefe de Traumatología del Juan Ramón tiene "conocimiento de que hay ortopedias que funcionan mejor que otras", que a título personal "sí puedo considerar que una determinada ortopedia funciona mejor, pero no lo recomiendo a los pacientes".

También compareció como testigo el 12 de septiembre la investigadora y directora de la agencia Manel Detectives, encargada de llevar a cabo las pesquisas y obtener los escandalosos resultados que sustentan la querella contra Ortopedia Gordillo. Ella explicó al juez que cuando el 10 de abril de 2013 se presentó en la puerta de la central de la empresa charló con varios usuarios que le indicaron que "Gordillo tiene un concierto con la Seguridad Social y le recomiendan ir a esa ortopedia". En paralelo a la completa ratificación de su informe, la detective subrayó que algún trabajador del hospital le contó cómo el dueño de Gordillo "invita al personal de Traumatología a comer en Navidad, que les regala aparatos electrónicos y cestas de Navidad, y otras gratificaciones que no sé a qué se referían", agregando que "decían que se gastaba hasta un millón de pesetas (6.000 euros) en las invitaciones".

Este punto fue rechazado de plano por los responsables médicos citados, quienes declararon que no tienen conocimiento de que se hagan regalos a personal del Juan Ramón o del Infanta Elena.

La detective refirió otro episodio, aquel acontecido el 24 de abril del año pasado en el que ella misma vio y grabó a la imputada M.J.G.M. entrando al control del Enfermería del Juan Ramón con una bata blanca similar a la del personal sanitario. Una vez dentro del mostrador, "habló con el personal y cogió la ficha de un paciente con una receta; luego estuvo con el paciente y volvió a Enfermería, pasaban los enfermeros y nadie le dio importancia a que estuviera cogiendo los documentos".

Previamente, el 10 de abril de 2013, la investigadora privada reconoció a otro de los imputados, M.M.G., comercial de Gordillo y trabajador de mantenimiento del Juan Ramón Jiménez, "saliendo del control de Enfermería y metiendo unos documentos en una carpeta; se fue a un sitio alejado, detrás de un patio, y después va a la secretaría de planta y busca a los médicos". Afirma la testigo que vio a M.M.G. "intercambiado recetas en la secretaría de Traumatología" y que más adelante se percató de cómo un trabajador sanitario "se paró a hablar con él y le dijo: "A ver si me cambias la referencia que tengo prisa", aludiendo supuestamente a las referencias de las recetas de los productos ortopédicos.

Los testigos médicos coincidieron indicaron que ellos sólo emiten las recetas de productos ortopédicos y que no a todas les dan el visto bueno, aunque en los últimos meses y con motivo de las carencias presupuestarias se ejerce un mayor control sobre pacientes y productos recetados, algo que la Administración les exige trimestralmente. Por contra, aseguran desconocer el turno de guardia de la ortopedias, porque "eso pertenece a Prestaciones", ni que exista un almacén de productos usados del que se pueda surtir Gordillo, como se apunta en la querella.

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