Las obras de remodelación de la Plaza de la Merced y peatonalización de su entorno comenzarán este mes. La actuación urbanística se ha adjudicado a TR Construya S.L.U por un importe de 2.197.159,99 euros y el plazo de ejecución es de dieciséis meses. El acuerdo fue formalizado el pasado 28 de diciembre. 

El proyecto plantea actuar en la Plaza de la Merced de manera integral, el espacio se integrará en su entorno mediante la peatonalización de parte de los viarios, concretamente los frentes este y oeste (Paseo Independencia y calle Vázquez Limón) y el lateral que da a la catedral y antiguo convento de La Merced, hoy Facultad de Empresariales de la Universidad de Huelva, conjunto arquitectónico declarado Bien de Interés Cultural (BIC), que se pretende realzar con esta intervención. El tráfico rodado se mantendrá en el viario de conexión de Paseo Independencia, calle Ruiz de Alda y Paseo de Buenos Aires, calzada que contará con carril bici. Ésta se dotará de aparcamientos para bicicletas y patinetes eléctricos.

La actual fisonomía de la plaza data de 1975, diseño del arquitecto Alfonso Jiménez Martín, que apostó por un espacio de estancia ajardinado y estructurado en diferentes alturas, realizado con obra de fábrica,hormigón y mobiliario de forja, con predominio de la gama de colores ocres a juego con la Catedral y la Universidad. La actuación que se llevará a cabo contempla la demolición de la actual plaza, que dará lugar a un gran espacio único a un mismo nivel. Se mantendrá el porche en la Facultad y la Catedral, mejorando su accesibilidad e integrándolo a la nueva imagen urbana.

Recreación de la nueva Plaza de la Merced desde la esquina con el Paseo de Buenos Aires.

El diseño de la remodelada plaza se plantea como una metáfora del agua, sus surcos delimitan los espacios de encuentro, que forman una secuencia de cinco estancias de forma elíptica, dispuestas en torno a una gran zona central. Las líneas de las luminarias crearán un anillo de luz perimetral en cada estancia, delimitadas por islas de vegetación, que actuarán como barrera acústica y pantalla visual hacia el tráfico de la calle Ruiz de Alda. El frente de cada una de las estancias quedará parcialmente abierto para conectarse visualmente al gran espacio central y al conjunto BIC de la Catedral y la Universidad. 

Respecto al mobiliario público, se opta por bancos corridos que hacen la función de alcorques de los elementos vegetales y arbolado. Podrán integrarse en el diseño del espacio público edificaciones de carácter lúdico y ornamental y aquellas necesarias para un adecuado uso ciudadano y zonas estanciales confortables.

Con las cinco estancias proyectadas en la plaza se pretende que cada colectivo, en función de sus edad, gustos o preferencias, elija y ocupe su lugar habitual en el espacio público, en el que se sienta cómodo, posibilitando acciones cotidianas como sentarse a leer, charlar, tomar el sol o contemplar el BIC en los bancos corridos o en los prefabricados. La finalidad es que la Plaza de la Merced sea un lugar seguro, versátil y accesible a todos. Estas estancias serán aptas para su uso como espacios multifuncionales. Se dejarán previstas las conexiones (hardware) para el anclaje de la estructura y las instalaciones de pabellones desmontables para albergar mercadillos locales, exposiciones y todo tipo de actividades culturales así como la celebración de festejos tradicionales.

Por otra parte, el gran espacio central podrá utilizarse como teatro al aire libre, cine de verano o lugar de conciertos, y el porche de la universidad, como escenario y telón de fondo. También contará la nueva plaza con mobiliario deportivo para mayores y zona de calistenia.

La peatonalización de los viarios colindantes obligará a reestructurar otras vías del entorno. El tráfico que desciende por la calle Menéndez Pidal deberá redirigirse por las calles Médico Luis Buendía y Ayamonte.