Es un profesor con vocación de atleta

Es propietario de la Academia Salvador Romero, que tiene dos sedes en Huelva capital: una en la céntrica calle Rui Vélez nº 15 y la otra en la avenida de las Fuerzas Armadas nº 10, cerca del Campus de El Carmen. Allí se imparten clases de apoyo a universitarios, Bachillerato, Primaria y Secundaria, y pruebas de acceso para mayores y módulos.

Serrano de pura cepa, nació en Castaño del Robledo (20-9-1969), donde vivió hasta los nueve años, cuando se trasladó junto a su familia a Huelva capital. Estudió en el colegio San José de Calasanz y luego cursó Ingeniería Técnica Industrial en la Escuela Politécnica de La Rábida.

La vocación como docente de Salva, como le conocen sus familiares y amigos, llegó cuando estaba en segundo de carrera y comenzó a dar clase a estudiantes de primero. Paulatinamente fue teniendo más alumnos hasta que se decidió a montar la academia, hace unos veinte años.

Felizmente casado con Pilar tienen dos hijos, que se llaman como sus progenitores: Pilar (15 años) y Salvador (13).

De pequeño, como muchos chiquillos, jugó al fútbol y estuvo federado con el Olimpic Onubense. Empezó a correr para adelgazar y como Forrest Gump ya no pudo parar. Hace unos catorce meses se decidió a participar en competiciones oficiales de atletismo. Ahora pertenece al Club Ruteros Onubenses. Prácticamente ha disputado todas las pruebas de gran fondo de la provincia, como pueden ser la Travesía Marismas del Odiel, las medias maratones de Valverde, La Palma del Condado, Palos y Ayamonte o las X Millas del Guadiana... También ha corrido en otras competiciones en Andalucía y ha completado el Maratón de Sevilla y el de Madrid. Incluso se atrevió con el durísimo ascenso al Pico Veleta (Granada), con 50 kilómetros de recorrido.

En su escaso tiempo libre le encanta estar con su familia, a la que agradece el sacrificio que hace por su afición al atletismo. También es un gran seguidor del Recreativo , al que desea muchos éxitos.