La prisión onubense de La Ribera ha estrenado hoy el primer módulo mixto de las cárceles andaluzas, donde cumplen condena tanto hombres como mujeres, un proyecto que busca, según los responsables de Instituciones Penitenciarias, "hacer más fácil su readaptación cuando salgan al exterior, donde conviven de manera normalizada", además de eliminar las trabas que la población reclusa femenina se encuentra cuando entra en el sistema carcelario.

En las instalaciones que han sido inauguradas esta mañana, dentro de la Unidad Terapéutica Educativa, conviven 17 hombres y 8 mujeres que duermen en celdas de secciones distintas dentro del mismo módulo. Salvo para dormir y descansar después de la comida, el resto del día comparten actividades y trabajos en las distintas secciones del módulo.

La experiencia ha sido acogida más que favorablemente por los propios internos, quienes en una visita esta mañana a las instalaciones, han reconocido que "si fuera vamos a estar hombres y mujeres juntos, dentro ayuda mucho compartir experiencias, consejos y vivencias entre todos y poder sobrellevar la estancia en prisión lo mejor posible". Los presos llevan días de charlas, encuentros y coloquios con el personal de tratamiento de la cárcel, por lo que "salvo los nervios de los primeros días, todo ha ido perfecto".

Una de las charlas que tienen los internos con los responsables de la prisión.

El acto ha sido presentado por Miguel Ángel Vicente Cuenca, Director General de Ejecución Penal de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias, que ha señalado que este tipo de módulos, de los que hay más de una docena en todo el sistema español, "suponen un esfuerzo tanto para el personal, como para los propios internos y además significan el saldar la deuda que se tiene con la población reclusa femenina, que cuentan con más dificultades que los hombres cuando llegan a estas instalaciones". En palabras del director de la cárcel onubense, Raúl Barba, "hasta ahora la prisión de Huelva era una cárcel de hombres, con un módulo de mujeres; a partir de hoy es una prisión de hombres y mujeres".