Sin obras no hay paraíso

DE entrante, ensalada templada de inauguraciones y festejos varios para los de Perico (PP), Huelva en el corazón, marineros en tierra. Desfile en Fitur, con ferry Huelva-Canarias para los de Petronila (PSOE), Huelva en el lugar que merece. Así, en la disputa por el concepto de onubensismo y de ambición de capital, corre el tiempo, tan callando, y de repente nos vemos en los efectos especiales del año electoral: 22 de mayo, veredicto de los comicios municipales.

También tan callando, a los mandatarios del PP en el Ayuntamiento les están saliendo bien algunas jugadas de supervivencia económica en esta cuesta de enero, cartuchos para estos meses en los que el equipo de Gobierno de Pedro Rodríguez tendrá que pasar el filtro de las urnas. Se consuma definitivamente la semiprivatización de Aguas de Huelva con la incorporación de Aquagest Andalucía SA como socio tecnológico (57,3 millones de euros, de los que 47 serán una inyección directa para el Consistorio); la venta del parking de la Casa Colón por más de lo previsto (7 millones de euros) y, entre otras maniobras, la adjudicación a la promotora inmobiliaria Prasur del suelo comercial de Isla Chica (5,9 millones). Recursos para capear el temporal y sofocar la cola de acreedores, empresas proveedoras de bienes y servicios, colectivos y organizaciones sociales.

Movimientos que el PSOE sigue con lupa, porque el marcador final depende, en buena parte, de cómo se administren estos caudales y el calado que tengan en la percepción del electorado. Y es que el reto de la alcaldable Guerrero para movilizar a la parroquia socialista se supedita a una triada de factores, el primero independiente y los dos últimos tremendamente imbricados: (1) el propio tirón que logre tener como candidata (donde se valora la impronta personal, el tino y credibilidad de sus propuestas, el trato directo con el ciudadano, el aura de liderazgo/carisma…) ; (2) El desgaste que provoque a Pedro Rodríguez el efecto dominó de la deuda del Ayuntamiento, aparte de la erosión (prácticamente inexorable) de cualquier dirigente político-institucional que lleve 16 años en el sillón. Tercer coeficiente (3), el escenario que presente la ciudad de aquí a mayo, vertiente que ya ha estado explotando la candidata del PSOE en su tourné para denunciar la "suciedad y abandono" de las barriadas. Justo esta semana, el teniente de alcalde de Infraestructuras y Servicios Municipales, Felipe Arias, pondrá en marcha un plan especial de limpieza y puesta a punto. Casualidades tiene la vida.

En cualquier caso, no termina aquí el esquema de condicionantes, porque la alcaldable socialista se enfrenta (aparte de al mal augurio de las encuestas, que siguen revalidando la mayoría absoluta de Rodríguez) al posible efecto arrastre del PSOE estatal y autonómico, el pesimismo ciudadano ante una situación económica de la que se responsabiliza en primer instancia al Ejecutivo de Zapatero, además del deterioro que provoca a las siglas socialistas el tener que asumir el coste político de las medidas de recorte que exige la crisis.

Con la perspectiva de este cóctel molotov volvemos al punto de arranque de esta crónica: efectos especiales, versión 2011. Todas las implicaciones subterráneas a las que nos hemos referido hasta ahora tendrán encima una pátina de folklore y mercadotecnia electoral por parte de unos y de otros.

En 2007 tuvimos un rosario de inauguraciones con el Parque Moret, el Muelle del Tinto, la Plaza de Las Monjas… El alcalde ha abierto ahora la veda con el monumento a Colón, la entrega de las llaves a los vecinos de Las Metas y seguirá con la Virgen del Rocío en la Plaza del Punto, la comisaría de distrito, algún otro as bajo la manga y, no lo olvidemos, los greatest hits, banderas de la transformación urbana a gran escala, para los que se pondrá toda la carne en el asador: Isla Chica -a prueba de escépticos, se considera que ya se ha puesto la primera piedra "psicológica" en el solar del estadio, desbloqueando la operación hace unos días- y el Ensanche Sur (incontables las fechas que se han dado para el inicio de la urbanización): esta semana viene a Huelva el presidente del Grupo Trusam, Juan Manuel Trujillo -que adquirió en 2004 las Marismas del Titán-, para cerrar algunos flecos porque, al parecer, hay planes de entrar en ejecución inminente.

Hay muy poco margen hasta el 22 de mayo y uno de los proyectos que acaba de salir del horno del Ayuntamiento es la fase inaugural del Ensanche: el nuevo Recinto Colombino, un parque ambivalente que liberará a la explanada actual para la construcción del centro comercial que promueven Descirea y Eroski.