Un nuevo palio para la Resignación

Enrique Bendala ha diseñado lo que será el futuro palio bordado de María Santísima en la Resignación de sus Dolores, un proyecto de la junta de gobierno de Manuel Martín que se espera poder emprender en varias fases conforme a las posibilidades económicas de la Hermandad del Descendimiento.

Proyecto que llegan en el nuevo mandato que acaba de iniciar esta junta de gobierno y en el que se plantea también la reforma de la hornacina donde se encuentra al culto la Virgen de la Resignación, en la parroquia de San Pedro, y que con anterioridad era la ocupada por los titulares de la Hermandad de la Borriquita. Enrique Bendala, en el proyecto presentado, señala que "lo inapropiado del espacio hace evidente la necesidad de adecuarlo a las proporciones de la imagen mariana". También resulta extremadamente pobre por lo que entiende se debe adecuar al estilo de la cofradía tanto en su estética a la hora de salir en procesión como con la iniciada en la capilla del misterio del Descendimiento y todo ello unido al marco de la propia iglesia de San Pedro.

El proyecto se concibe como un marco donde realzar la imagen de la Virgen, con sobriedad pero con elegancia, disponiéndose dos sencillas pilastras que se unen con arco de medio punto, apoyándose el conjunto en una base rectangular a modo de repisa, que soporta visualmente la imagen. Este conjunto va ligeramente adornado con tallas en madera que realzan el austero diseño. Todas estas piezas van en color caoba oscura, siguiendo las líneas estéticas del paso del Cristo del Sagrado Descendimiento, así como de la capilla que lo acoge durante el año.

En cuanto al ambicioso proyecto de bordado del palio de María Santísima en la Resignación de sus Dolores, Enrique Bendala lo ha concebido de una forma global, "tratando de integrarse con todo el conjunto del palio y buscando la sobria y elegante línea que entiende la cofradía se ha marcado con gran acierto".

Aunque ideado como un todo se puede distinguir tres partes fundamentales: bambalinas exteriores, bambalinas interiores y techo de palio. Las bambalinas exteriores recuerdan en su parte superior a las actuales, conservando el diseño con dos galones rectos y de distinto tamaño que las rematan, pero ahora enriquecidos con una sencilla cenefa de hojas que se enroscan en el galón inferior.

A continuación y hacia abajo aparece una franja de espacio vacío que realza la gran cenefa de hojas de acanto y flores que ocupa la zona central de las bambalinas y de la que algunas de dichas hojas cuelgan hacia el borde inferior dando lugar al singular perfil con el queda rematada, con puntas de diferentes tamaños y a distintas alturas, confiriéndole una gracia que contrasta y compensa a la vez con la rectitud de la parte superior, lo que equilibra la composición al igual que lo hace la parte vacía con la profusamente bordada.

La gran cenefa tiene una estructura geométrica a base de espirales engarzadas que tienen su origen en la parte central de cada bambalina, punto a partir del cual se desarrolla hacia los extremos, repitiendo motivos de hojas y flores.

El punto de partida es distinto en cada una de las cuatro bambalinas que forman el palio. En la delantera aparece el monograma mariano, en el que las letras A y M, iniciales del saludo del ángel Grabriel a la Virgen, se entrelazan; en la trasera será un corazón con puñales y en las laterales con azucenas y rosas. En el interior del palio recorrerá bordada la estrofa del Stabat mater.

En cuanto al techo de palio la composición es más sencilla donde se refuerza el efecto visual del conjunto pero no por ello menos elaborada. Por eso el techo, buscando la armonía con el diseño interior de las bambalinas reproduce en todo su contorno la misma cenefa de las puntas interiores pero mirando dichas puntas hacia el interior y en el centro del mismo un gran óvalo con cenefa de similar factura, en cuyo interior se enmarca una escena pintada al óleo. Se trata del pasaje del evangelio de san Lucas que narra la presentación de Jesús en el templo por sus padres y como mandaba la antigua ley de Moisés.