Todo cuanto necesitas saber sobre los humidificadores

Los humidificadores son los aparatos que vaporizan el agua y aumentan la humedad del ambiente para que sea más saludable. En un contexto seco, el aire tiene polvo que se respira y puede dañar las vías respiratorias provocando boca seca, tos, gripe y otros problemas de salud.

Los niveles adecuados de humedad se encuentran entre el 40 y 50%, algo que fácilmente logra un aparato de este tipo. Pero no todos los humidificadores son iguales, pues el mecanismo que utilizan para producir la humedad son diferentes, tienen diversas funciones y diseños. Por ejemplo, esta comparativa de humidificadores te puede ser útil para salir de dudas.

Tipos de humidificadores

Si te has decidido a comprar un humidificador, es necesario que conozcas los tipos que existen en la actualidad. Básicamente, existen 3 clases que se clasifican según su forma de producir la humedad que, en combinación con aspiradores nasales, aquí puedes ver algunos de los mejores, crean un ambiente único para respirar de forma saludable.

Humidificador de vapor frío

El humidificador de vapor frío, también llamado humidificador ultrasónico, es un depósito de agua que se evapora mediante ultrasonidos. Son aparatos muy silenciosos, permiten regular la humedad y la temperatura del ambiente, son más fáciles de limpiar y también son promedialmente más caros.

Los modelos de vapor frío de gama media-alta pueden contar con ionizador, que mejora la calidad del aire mediante un ionizador o purificador de aire. El aparato cuenta con una placa cargada electrostáticamente que invierte la carga de iones reduciendo los alérgenos, las bacterias y los contaminantes del aire.

Humidificador de vapor caliente

Este tipo de humidificador consiste en un depósito de agua que hierve y libera vapor. La desventaja de estos aparatos es que si no se utiliza en su interior agua destilada, se forman incrustaciones de cal. También son un poco ruidosos, pero más baratos que los humidificadores de vapor frío.

Humidificador evaporativo

El humidificador evaporativo cuenta con un depósito que se llena con agua fría y de allí se transfiere a una base, haciendo pasar el aire a través de un filtro húmedo, donde se evapora, aumentando la humedad ambiental. La ventaja de estos humidificadores es su bajo coste.

Cómo elegir humidificadores de calidad

Al elegir un humidificador, debes tener en cuenta tus necesidades. Usualmente, lo más recomendable es observar las siguientes características:

Tamaño

El tamaño del humidificador depende de la humedad que necesites. Esto lo puedes averiguar en la cantidad de metros cúbicos que humidifica el aparato, que se mide en ml/h. En zonas de clima árido, es recomendable un humidificador para cada habitación, mientras que en aparatos para el uso de niños y bebés basta colocar un aparato pequeño cerca de su cama.

Los humidificadores por debajo de 200 ml/h son para habitaciones de menos de 20 metros cuadrados, mientras que los de 400 ml/h o más, son eficaces en habitaciones de hasta 50 o 60 metros cuadrados.

Funciones

Los humidificadores pueden tener varias funciones, como el apagado automático, el sistema que deja de funcionar solo cuando el aparato alcanza niveles muy bajos de agua. También se pueden encontrar modelos con temporizador, que se regulan para que trabajen una cantidad de horas predeterminadas.

El modo nocturno es una de las funciones más útiles, pues permite que el aparato trabaje en la noche con un mínimo de emisiones y de nivel de ruido. La regulación de la emisión de la humedad es otra de las características importantes, pudiendo ajustar la intensidad del vapor para humidificar más lento o más rápidamente el ambiente.

Los modelos que cuentan con un higrómetro integrado permiten especificar el porcentaje de humedad deseado para que se mantenga en esos niveles de forma automática. En los humidificadores de calor, suele incorporarse una bandeja en la que se vierten gotas de esencias para aromatizar el ambiente.

Mantenimiento

Antes de decidirse a comprar un tipo de humidificador es conveniente detenerse a considerar la complejidad del sistema y el mantenimiento que requiere, como el cambio de filtros, la limpieza o sustitución de piezas.

En algunos casos, estos electrodomésticos cuentan con filtros que duran más tiempo e incluso filtros permanentes de microporosa o cerámica. Todos los tipos necesitan de una limpieza periódica para eliminar el moho y otras sustancias que se almacenan en su interior y que generan malos olores, así como para prevenir la acumulación de cal.

Las mejores marcas de humidificadores

En este tipo de equipos que son tecnológicamente sencillos es posible comprar marcas que no son tan conocidas o que son incluso desconocidas, pues la calidad generalmente está asegurada. Las marcas más conocidas quizás incluyan funciones o un mejor diseño, pero los modelos más simples funcionan también de forma eficaz.

La ventaja de elegir humidificadores de marcas conocidas es que suelen contar con una mejor garantía y un servicio técnico más eficiente. Es el caso de Philips, una marca que ha desarrollado su propia tecnología llamada Nanocloud, que es diferente a la de ebullición y ultrasonidos.

Otras marcas que producen humidificadores de buena calidad son Medisana, Ufesa, Laica, Beurer, Delonghi, Jata, Miniland, Artrom, Solac, Chicco, Victsing, Taurus y Honeywell, entre otras.