Moeve prevé poner la primera piedra del Valle Andaluz del Hidrógeno Verde este año 2025

El Valle Andaluz del Hidrógeno Verde, uno de los mayores proyectos industriales vinculados a la transición energética en Europa, se prepara para arrancar en la provincia de Huelva. Moeve —la antigua Cepsa— prevé colocar la primera piedra de su planta en Palos de la Frontera a lo largo de este mismo año 2025, una vez alcance la denominada decisión firme de inversión. Así lo ha confirmado este viernes en la capital onubense el consejero de Industria, Energía y Minas de la Junta de Andalucía, Jorge Paradela, quien ha asegurado que el proyecto “cuenta ya prácticamente con todos los permisos necesarios”.

La iniciativa, que también tendrá sede en San Roque (Cádiz), ha sido incluida en la Unidad Aceleradora de Proyectos de la Junta y cuenta con el respaldo de la Unión Europea como Proyecto de Interés Común Europeo (IPCEI). En total, supondrá una inversión global cercana a los 4.000 millones de euros y la creación de más de 2.800 empleos directos entre sus fases de construcción y explotación. La planta onubense, denominada Moeve Onuba, se levantará en el Parque Energético La Rábida y ya ha iniciado movimientos de tierras previos al inicio de obras.

Paradela, que participó en la presentación de la Memoria 2024 de la Asociación de Industrias Químicas, Básicas y Energéticas de Huelva (AIQBE), ha señalado que “la tramitación ha sido compleja, con permisos medioambientales, de aguas y de acceso a potencia”, pero ha destacado el compromiso de la empresa y su hoja de ruta para que las obras arranquen “dentro de este mismo año 2025”.

Moeve Onuba contará con una capacidad de electrólisis de 400 megavatios (MW) para producir hidrógeno verde, con el objetivo de sustituir el consumo de hidrógeno gris en sus procesos industriales y exportar a otros mercados. La previsión es que entre en funcionamiento en 2026 y alcance su plena capacidad operativa en 2028, evitando la emisión de más de 480.000 toneladas de CO₂ al año.

A esta planta se sumará una segunda en San Roque, Moeve Carteia, que alcanzará los 1.000 MW y producirá derivados como amoníaco verde o metanol para el transporte y la industria química. Ambas estarán conectadas a través de corredores logísticos y portuarios, lo que posiciona a Huelva como pieza clave en la nueva economía del hidrógeno.

El consejero ha recordado que Moeve ya está ejecutando otras dos inversiones estratégicas en Huelva: la mayor planta de biocombustibles 2G del sur de Europa, promovida junto a Bio-Oils y que cuenta con 1.200 millones de euros de inversión, y “cuyas obras avanzan a buen ritmo”, y la planta de alcohol isopropílico (IPA), con una inversión de 80 millones, que supondrá una nueva línea de negocio vinculada a la industria verde.