Los laboratorios hospitalarios de Huelva se juegan su futuro

No está en juego el servicio que los laboratorios de los hospitales que el Servicio Andaluz de Salud tiene en Huelva.Lo que está en juego es su configuración. Aún no se sabe si habrá uno único para toda la provincia o se mantendrán los tres actuales que se reparten entre los hospitales Juan Ramón Jiménez, el Infanta Elena y Riotinto.

Todo ello se sabrá presumiblemente a partir del próximo mes de septiembre. Respecto a este asunto, la Consejería de Salud ha emitido una resolución en la que se anuncia que se establecerá un comité asesor que tendrá como “objetivo el de plantear a la Dirección-Gerencia del SAS, la organización de los laboratorios clínicos en el ámbito del Servicio Andaluz de Salud”.

Esta medida está justificada a causa de “la variabilidad interprovincial en la prestación de servicios, lo que justifica la constitución de un comité asesor que, bajo una misma estructura de gestión integral, garantice una oferta diagnóstica sostenible en los laboratorios clínicos del Sistema Sanitario Público de Andalucía atendiendo a criterios de equidad, accesibilidad y eficiencia”.

El dar una respuesta equitativa para toda la comunidad es algo así como una asignatura pendiente que con el paso de los años, no se ha podido o querido abordar. De este modo, el comité tendrá el encargo de “constituir el comité asesor con el objetivo de asesorar a la Dirección-Gerencia del Servicio Andaluz de Salud sobre la organización de los laboratorios clínicos, su gestión autonómica y provincial, así como el dimensionamiento de los recursos humanos necesarios, de la cartera de servicios, la gestión de la demanda, la oferta tecnológica y sistemas de información a implantar, así como proponer el plan de compras de cada centro de acuerdo a unos estándares comunes de calidad y excelencia”. En el comité figuran responsables de distintas áreas de toda la región incluido el jefe del Servicio de Análisis Clínicos del Juan Ramón Jiménez como representante onubense.

La nueva configuración que el SAS quiere dar a los laboratorios clínicos añade por otro lado, la conveniencia de establecer una red que sea más eficaz también desde el punto de vista económico.

Respecto a Huelva, la gran novedad en este ámbito tuvo lugar hace más de dos años cuando se procedió a la renovación de buena parte del laboratorio del Juan Ramón Jiménez que conllevó la dotación de tecnología de vanguardia y técnicas de alta cualificación científica. Eran momentos en los que estaba en vigencia el Complejo Hospitalaria que tenía unificados el Juan Ramón Jiménez y el Infanta Elena y la estadística pese a ello, era reveladora: 10 millones de analíticas cada año.

La renovación consiguió que algunas de las pruebas que tenían que irse fuera de Huelva pudieran tratarse en el Juan Ramón que vinieran profesionales del extranjero para verificar la configuración que se había realizado en este servicio del hospital onubense.

A día de hoy, Andalucía tiene un variopinto panorama respecto a los laboratorios clínicos. En algunos sitios están provincializados, caso de Granada, comarcalizados como en Cádiz o manteniendo cada hospital su laboratorio como sucede en Huelva aunque hace unos años hubo un intento de unificarlos.

Lo cierto es que este mismo año acaba el concurso de adjudicación de los laboratorios onubenses y de lo que salga de ese consejo asesor, será decisivopara saber si Huelva contará con un laboratorio provincial o seguirá en la situación actual.

El proceso de unificación de los dos hospitales de la capital, también afectó a esta área asistencial. De hecho, el Hospital Juan Ramón Jiménez absorbió buena parte de la actividad pues se quedó con Biología Molecular.

Sin embargo, la configuración con la que quede Huelva y el resto de las provincias no es lo más importante. Lo básico de todo este movimiento se encamina a que Andalucía cuente con tres laboratorios principales que asuman las muestras más complicadas que habitualmente se derivan a laboratorios de Cataluña.

Lo que sí está claro que pese a la futura configuración, cada hospital deberá contar con un laboratorio que asuma las muestras de urgencias. Un efecto colateral pero importante al mismo tiempo, que podría provocar la nueva configuración de los análisis clínicos sería el movimiento de trabajadores de un lugar a otro lo que ha pasado cuando se ha procedido a la centralización de otros servicios.