Huelva

Los 25 años de inclusión del IES Clara Campoamor de Huelva

  • El centro celebra su cuarto de siglo con diferentes actividades para el alumnado

El IES Clara Campoamor, con los carteles que indican en su fachada que cumplen 25 años.

El IES Clara Campoamor, con los carteles que indican en su fachada que cumplen 25 años. / Germán Rodríguez (Huelva)

"Nuestra apuesta es la realidad, somos un equipo directivo de campo", es la afirmación de Inés Picón, directora del IES Clara Campoamor de Huelva, un centro de Secundaria de la capital que cumple 25 años de trayectoria educativa. Un centro referente en la atención a alumnos con necesidades educativas especiales, el primero de integración, que abrió sus puertas a estos niños cuando otros eran más reticentes. Cuentan también con un Aula Específica de Autismo que atiende este curso a tres alumnos y también cuentan con cerca de diez escolares con Asperger que asisten a las aulas ordinarias y reciben en ellas la ayuda de un docente en Pedagogía Terapéutica.

"El fin, como el de todos los centros, es el de ofrecer una educación integral, pero sobre todo la atención a la diversidad. Aquellos niños que tienen un apoyo familiar van solos, pero trabajamos contra el fracaso escolar, para lo que tenemos que percibir los problemas que puedan existir escuchándolos, las puertas están siempre abiertas", es la declaración de Inés Picón, cuyo equipo directivo se ha estrenado este año en esas labores.

Día de convivencia de la comunidad escolar del IES Clara Campoamor en Punta Umbría por su 25 aniversario. Día de convivencia de la comunidad escolar del IES Clara Campoamor en Punta Umbría por su 25 aniversario.

Día de convivencia de la comunidad escolar del IES Clara Campoamor en Punta Umbría por su 25 aniversario. / M. G.

Toma el relevo de Antonio Pelayo, director hasta el curso pasado y docente del centro, de Geografía e Historia, desde que arrancara allá por el curso 1996/1997. Antes, en esa misma sede que hoy ocupa el IES Clara Campoamor, estaba la Escuela Nacional XXI Años de Paz y después el colegio de EGB Odón Betanzos.

"Los comienzos fueron difíciles", rememora Pelayo. Recibían a alumnado con dificultades y sufrieron problemas para la matriculación por esa cierta mala fama. En la actualidad eso forma parte del pasado porque hace 25 años no llegaban a los 300 alumnos y hoy forman a 465. A este instituto están adscritos los escolares del CEIP San Fernando y del CEIP Reyes Católicos, cuya "fidelidad es casi completa, la gran mayoría vienen aquí a continuar sus estudios". A su vez, los alumnos del IES Clara Campoamor tienen su plaza asegurada en el IES Alonso Sánchez o en el IES San Sebastián.

La mascota de la biblioteca del centro, obra de Lorena Aparicio Pevidad. La mascota de la biblioteca del centro, obra de Lorena Aparicio Pevidad.

La mascota de la biblioteca del centro, obra de Lorena Aparicio Pevidad. / M. G. (Huelva)

En cuanto a la plantilla docente, en la actualidad está formada por 47 profesionales, la mayoría de ellos definitivos, "lo que es buena señal", apunta Pelayo, memoria viva del transcurrir del centro.

Las bodas de plata no podían pasar inadvertidas, por lo que a lo largo del curso y también pensando en el que viene, han promovido diferentes actividades de celebración. Entre ellas, que los alumnos conozcan la figura que hay detrás de la mujer que da nombre a su instituto. Eso lo han podido hacer a través de la película Clara Campoamor. La mujer olvidada, dirigida por Laura Maña e interpretada por Elvira Mínguez.

Este aniversario ha servido también para realizar un concurso con el que elegir la mascota de la biblioteca. La ganadora ha sido Lorena Aparicio Pevidad, alumna de 3, autora del dibujo de una lince muy aplicada -"porque el que lee es un lince", interpreta Pelayo- que recibe el nombre de la autora.

Para celebrar este cumpleaños la comunidad escolar también se ha reunido en los pinos de Punta Umbría y la iniciativa más inminente tiene forma de camiseta conmemorativa de la efeméride. Además, tiene causa solidaria porque los beneficios de las ventas se destinarán a la Asociación Provincial contra el Cáncer, un homenaje a los alumnos fallecidos por culpa de esta enfermedad, que han sido cinco en 25 años.

Además, una vez termine el periodo lectivo, reunirán a antiguos alumnos y profesores para compartir otro acto en relación con estos 25 años de educación. Un cuarto de siglo ya en el que se ha adaptado a los cambios educativos y en el que, afirma el centro, "ha ido constituyendo su identidad basada en la calidad educativa y en la transmisión de valores esenciales para la formación integral del alumnado. La tolerancia, el respeto y la importancia del esfuerzo junto a la integración y la aceptación de la diversidad son parte de su esencia".

  

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