La Fiscalía ha solicitado dos años de cárcel y el pago conjunto de 439.000 euros a tres personas consideradas responsables del incendio forestal registrado en mayo de 2016, en el paraje Pallarés-Las Piletas de Fuente la Corcha que arrasó 181 hectáreas. El fiscal, en el escrito de acusación al que ha tenido acceso Efe, los considera autores de un delito de incendio forestal y pide para cada uno de ellos dos años de cárcel y una multa de 2.300 euros.

Asimismo, en concepto de responsabilidad civil los acusados, conjunta y solidariamente indemnizarán a la Consejería de Medio Ambiente en 137.238,83 euros por los gastos de extinción del incendio y en 110.074,84 euros por daño ambiental y a los perjudicados por los daños en sus fincas un montante total superior a los 191.000 euros.

Precisa el fiscal que el acusado G.A.A, como trabajador de la empresa Silvasur, perteneciente a Ence, era el encargado en 2016 de pedir a Junta de Andalucía los permisos preceptivos para las tareas de corta, astillado y aprovechamiento forestal en las fincas que la citada empresa tiene para el suministro de material a su planta de San Juan del Puerto, y así lo hizo.

Subcontrató la ejecución con la empresa Logmax, a sabiendas que el material empleado por dicha empresa, y concretamente las máquinas astilladoras, habían ocasionado problemas y en concreto conatos de incendios en otras ocasiones y sin exigir a dicha empresa mayores medidas de seguridad ni supervisar directamente los trabajos. Por su parte, el acusado I M G R, como trabajador de Logmax se encontraba realizando tareas de corta, astillado y apilamiento de la masa forestal de eucaliptos usando para ello una máquina astilladora de las que había generado problemas.

Allí también se encontraba el acusado J.R.T.S, como encargado de supervisión de los trabajos descritos por parte de Ence, dando indicaciones al maquinista sobre el trabajo concreto a realizar y sin adoptar ninguna adicional medida de precaución. Por ello, al no adoptarse medidas adicionales de precaución, no existir agua suficiente, ni realizarse cortafuegos y además situarse las pilas de astillas ya cortadas y de cenizas incandescentes a menos de 10 metros de arbolado, sobre las 11:30 horas saltaron chispas de las pilas o de las cenizas incandescentes extendiéndose el fuego por el fuerte viento al terreno forestal y en concreto a los eucaliptos.