Huelva viaja a sus raíces festivas con la exposición 'Feria y Velada de La Cinta. Los orígenes'

Huelva abrió esta semana una ventana a su historia a través de la exposición temporal Feria y Velada de La Cinta. Los orígenes, una muestra que invita a sus visitantes a sumergirse en los inicios de una de las tradiciones más emblemáticas de la ciudad: las fiestas dedicadas a la Virgen de la Cinta, la Patrona de la ciudad.

El evento, organizado por el Ayuntamiento de Huelva, a través del Archivo Municipal, podrá visitarse hasta el 19 de septiembre de lunes a viernes, en horario de 9:00 a 13:30 en el vestíbulo del Archivo Municipal, ubicado en la Casa Colón (Pabellón de Levante), y de forma totalmente gratuita.

La exposición reúne una cuidada selección de manuscritos, planos, fotografías, dibujos e impresos que documentan la evolución de la festividad dedicada a la Virgen de la Cinta desde la segunda mitad del siglo XIX hasta los años veinte del pasado siglo XX. Un recorrido que abarca más de medio siglo de documentos históricos y que permite comprender cómo la celebración pasó de ser un culto de carácter gremial a convertirse en el acontecimiento social y festivo más importante de la capital onubense.

De culto marinero a feria oficial

Este itinerario expositivo recuerda cómo, en el siglo XVIII, la fiesta en honor a la patrona de Huelva era organizada por el gremio de mareantes, quienes la vivían como un acto principalmente religioso. Sin embargo, a partir de 1862, la cita dio un salto significativo y se consolidó como la feria oficial de la ciudad, añadiendo también los elementos lúdicos, sociales y culturales que hoy en día la definen.

"Aquí está la primera acta capitular de 1862, donde se propone ya crear una feria independiente de lo que es la fiesta litúrgica, la fiesta religiosa", explica Luisa Borrallo Oliver, directora y responsable del Archivo Municipal, subrayando la importancia de este documento como un gran punto de partida para entender el cambio de carácter que tuvo esta celebración.

Un recorrido circular por el pasado de Huelva

En las pequeñas cristaleras que llenan el vestíbulo del Archivo Municipal de la Casa Colón, se encuentran expuestos con un cuidado especial más de una decena de documentos que ilustran y explican la feria que aunaba la devoción, la identidad y la alegría de todo un pueblo en torno a su Patrona. Todos los escritos que se exhiben proceden de los fondos del Archivo Municipal de Huelva, y son documentos originales. "Se trata de manuscritos, impresos, carteles, fotografías... Todo lo relacionado con los orígenes de la feria y la velada de la Cinta", señala Borrallo. En esta ocasión, se incluyen piezas que hasta ahora permanecían inéditas para el gran público y, entre las más llamativas, destaca la primera propuesta que se realizó, la cual tenía la intención de ubicar la feria en la Plaza de la Merced y la calle Vega Larga, así como las primeras solicitudes de atracciones. "Querían instalar un cosmorama, que eran los inicios del cine, o lo que eran las tómbolas, que en principio fueron un bazar de juguetes y comidas", comparte la directora.

Otros de los documentos muestran las rebajas especiales que se hacían a los billetes de tren para la feria de 1881, anuncios de atracciones como los célebres caballitos Potoño, los globos y los fantoches, un espectáculo de títeres de 1888 cuyo precio de entrada también se conserva registrado.

El recorrido se completa con fotografías antiguas que muestran cómo se iluminaba la Velada, un reflejo de cómo la feria fue incorporando innovaciones técnicas a lo largo del tiempo. Primero, se usó aceite, después gas -con arcos y tulipas de cristal- y, a comienzos del siglo XX, la luz eléctrica deslumbró las fiestas que desde hace más de un siglo y medio marcan el septiembre onubense, con arcos monumentales y fachadas iluminadas. Además, entre los documentos se incluyen referencias a eventos más singulares, como el festival de aviación de 1911 y las regatas y cucañas marineras que acompañaban las celebraciones y que funcionan como testimonios que muestran la conexión entre Huelva, su puerto y su Patrona.

Más allá de su interés documental, la muestra funciona como un ejemplo de identidad para los onubenses, encontrando entre las páginas del pasado que se exponen la explicación de muchas de las tradiciones actuales. Así, con esta propuesta cultural, la Casa Colón se convierte también en un espacio donde la historia, la devoción y la memoria se reencuentran, ofreciendo a sus ciudadanos y visitantes la oportunidad de redescubrir los orígenes de las que fueron y siguen siendo una de las fiestas más queridas de Huelva.