"Si existe algo gratificante en nuestro trabajo es hacer feliz a las personas"

Sevillano hasta la médula y del barrio trianero El Tardón es el mayor de los hermano Cadaval, Jorge. Junto con sus hermano César han creado las mejores actuaciones humorística de nuestro país y han dado vida a dos mujeres, hoy inconfundible: Antonia y Omaita. ¿Quien no recuerda aquella cabecera "Esta noche está es tu cadena, la primera con Los Morancos" de TVE?. Los Morancos se disponen este 26 de agosto (22:00) a ofrecer a todos los interesados y amantes del buen humor un espectáculo en Islantilla en el Palacio de Ferias y Congresos de Islantilla.

-¿Cuando y como surgió el dúo humorístico que actualmente formáis César y usted?

-Pues hace ya 32 años que surgió toda esta historia y la idea del dúo humorístico fue de mi hermano César. Yo me uní un poco más tarde porque él empezó con un amigo. Todo empezó con una apuesta y yo estaba estudiando por aquel entonces y por esa apuesta me metí yo en el grupo y hasta hoy estoy en el mundo de la farándula.

-¿Nunca pensó dedicarse a otro oficio?

-Yo nunca me dedique a otra cosa porque me gustaba lo que estaba haciendo desde el principio. En un primer momento me lo tomé como un hobby ya que era un estudiante que llegaba a un sitio y me daban 500 pesetas. Vi que ésto no estaba mal. Con sus pro y sus contra decidí dedicarme a ello y aunque no hubiera salido, no me arrepiento. Estoy encantando de como me han ido las cosas y volvería a repetir porque ha sido una buena vida.

-En vuestras actuaciones ¿tenéis guiones?, ¿improvisáis?, ¿cómo preparáis vuestros espectáculos?

-Nosotros vamos viendo lo que nos gusta y comentamos. Somos muy de calle y lo plasmamos todo en el escenario de forma directa. Intentamos ser nosotros mismos, ser lo mas naturales posibles y no hay otra historia. No vamos con un segundo mensaje ni pensamos. Disparamos del tirón e intentamos ser nosotros. La gente nos sigue, nos quiere y por ello estamos orgullosísimos y encantados.

-¿Es gratificante sacar sonrisas a muchas personas, no?

-efectivamente. Si existe una de las cosas gratificante de este trabajo es hacer feliz a los demás. Tú no eres consciente ni te das cuenta hasta que no estás en la calle y ves las cosas que te dice la gente. Me han dicho muy buenas cosas a lo largo de mi vida y en positivo siempre. Es de las mejores cosas que tiene este oficio y cuando las personas te dicen cosas buenas no sabes lo que decirle, te quedas descolocado.

-¿Cómo recordáis vuestra primera aparición en televisión?

-Pues pasamos por un momento en el que no nos conocía nadie a ser invitados a la televisión, concretamente a TVE y actuamos ante 20.000 personas en un programa de navidad. Del anonimato, pasamos a entrar en todas las colas, nos miraba todo el mundo, todo el mundo te sonreía, nos sentíamos extraños. La fama es una cosa muy efímera, te acostumbras, pero sobre todo a mi y a mi hermano lo que nos importa es hacer espectáculo y ver que la gente se queda para verlo y se va a casa a gusto y bien. Así también se olvida todas las historias y todos los problemas que uno tiene a lo largo de la vida.

-¿Cómo recuerda la etapa en la que actuabais en las salas de Sevilla?

-Nosotros hemos estado en muchos pubs, bares y discotecas no sólo de Sevilla, sino de España entera. Estoy orgullosísimo. Ahora, en realidad, la cosa está más fácil porque hay muchas más cadenas de televisión, pero anteriormente, ante de que nos contrataran en televisión, llevábamos 6 años yendo a todos los sitios y a todas las fiestas para actuar. La gente nos ha tratado muy bien en todos lados tanto cuando se nos conocía como cuando no se nos conocía. Estoy agradecido a la vida.

- En la vida íntima y no pública ¿sois también igual o sólo cuando estáis delante de la cámara?

-Somos los más saboríos de la familia. César es un tío graciosísimo, simpático, tiene mucha gracia, un humor que te tienes que reír con él, con un sentido de humor mas grande que el corazón que tiene. Es un tío muy grande en todos los sentidos. Yo tengo mis momentos igual que el resto de los mortales, en mi casa es donde me sufren, donde se cierran mis puertas y donde está mi "yo". Algunas veces estoy estupendo y pletórico y en otros momentos no. No somos extraterrestres.

-¿La crisis económica también afecta a este peculiar oficio?

-A todo el mundo le afecta la crisis. En la vida de la farándula hay momentos en los que se está bien y momentos en los que se está mal. La crisis afecta una barbaridad y siempre tienes que decir que estás bien. Aunque no sólo esta crisis económica nos afecta, sino muchas otras crisis que hemos pasado también. Hay momentos que en la vida no te va tan bien y tiras para adelante como todo el mundo y cuando te va mal pues al mal tiempo, buena cara. Se que hay mucha gente que está peor que nosotros y mi consuelo es mirar a mi alrededor y ver que estoy bien para como están los demás. No podemos hacer otra cosa, sino me volverías loco.

-¿Cree que vuestros personajes más aclamados son Antonia y Omaita?

-Son unos personajes que han calado mucho, son una familia que la hemos creado nosotros, que están ahí y que yo me siento orgullosísimo. Nosotros somos andaluces por encima de todo. Tu ves cualquier reality y ves las cosas que suceden y te das cuenta como está la situación. Yo siempre digo por eso que la realidad supera a la ficción. Es mucho más fuerte la realidad que todo lo vemos en televisión.