Estudio en Escarlata

En 1887, en la revista Beeton's Christmas Annual, fue publicada por primera vez la novela titulada Estudio en Escarlata, donde debutan el detective Sherlock Holmes y su fiel compañero, el Dr. Watson. Sherlock Holmes se convirtió en icono de la cultura popular, así que pronto comenzaron a surgir una gran cantidad de parodias y homenajes, como, por ejemplo, la teleserie de anime de Hayao Miyazaki y la serie de cómics Mortadelo y Filemón, Agencia de Información, de Francisco Ibáñez.

El que más parecido guardaba a su contrapartida, era Filemón, que llegó a vestir igual que Holmes en la historieta publicada el 31 de marzo de 1958. Filemón era el más inteligente de los dos. Mortadelo lleva inicialmente el paraguas y el bombín que lo asemejan a Watson, pero hereda la habilidad de Holmes de disfrazarse. Al principio, sacando los disfraces del sombrero, recurso que Ibáñez terminó eliminando para aprovechar más el espacio.

La serie Mortadelo y Filemón, Agencia de Información debutó el 20 de enero de 1958 en la revista Pulgarcito. Penguin recupera en 2025 los doscientos primeros casos de los detectives más famosos del cómic español, en un volumen que ordena cronológicamente las historias publicadas entre el 20 de enero de 1958 y el 2 de octubre de 1961. Como curiosidad: el color predominante en la portada de este tomo es, precisamente, el escarlata.

En 1958, cuando debutaron Mortadelo y Filemón, Manuel Vázquez triunfaba en Bruguera con su serie La Historia esa, vista por Hollywood en la revista Can Can. El éxito obtenido, conjugado con la mítica impuntualidad de Vázquez, propiciaron que la editorial encomendara a sus autores que imitaran el estilo de Vázquez. Esto incluía a Francisco Ibáñez, que se convirtió en continuador de Vázquez en La Historia esa, vista por Hollywood. Aún faltaba una década para que Bruguera pusiese a Ibáñez a imitar a Franquin, y luego, a todos a imitar al propio Ibáñez. Pero eso..., es otra historia.

El tomo comienza con una biografía del autor que abarca hasta el año 1961, para proseguir con un artículo que explica cómo la serie refleja determinados aspectos de la época. Posteriormente, las primeras 123 historias tal y como fueron publicadas: algunas en blanco y negro, otras en duotono, y a color las que se publicaban en portada de la revista Pulgarcito. Luego, un artículo sobre la evolución de la serie, tanto argumentalmente como en el dibujo. Son textos de Antoni Guiral y Jordi Canyissà, de los mejores teóricos de cómic de España, que son responsables de la edición. Finalizan el tomo otras 77 historietas y un texto biográfico sobre Ibáñez.

Titánico el trabajo de Rubén Larrea en la restauración de las páginas. La decisión de publicar las historietas como aparecieron originalmente hace que, en ocasiones, veamos colores que se salen de las líneas, pero ese problema era habitual entonces. La edición es muy buena, y hay que felicitarse por tener por fin estas páginas accesibles, que son Historia con mayúsculas del tebeo español.

Años antes de ser agentes de la T.I.A., Mortadelo y Filemón tenían una agencia de detectives, que son las historias que nos encontramos en este tomo. Estamos ante historias de solamente una página, salvo alguna excepción publicada en especiales de la revista, que tienen dos páginas.

Las historietas suelen partir de un esquema en el que les encargan investigar un caso, o descubren un posible crimen, pero, por torpeza de Mortadelo, todo acaba saliendo mal. Sin embargo, Ibáñez se sale a veces de lo habitual, algo nada sencillo, ya que había que lidiar con la censura. Vemos crítica social en la relación de poder entre jefe y empleado, dando idea de muchos aspectos de la época, a pesar de ser publicaciones supuestamente para los niños.

En los guiones, desaparece la costumbre de los personajes a narrar lo que hacen, especialmente Mortadelo, que en las primeras historias cuenta de qué se va disfrazando. Con el paso de las historias va dejando de hacerlo, logrando mayor agilidad.

En estas historietas hay constantes cameos de otros personajes de Bruguera, que sirven como un homenaje a sus autores. La edición de Los 200 primeros casos de Mortadelo y Filemón es de las mejores noticias de este año para lectores de cómics.

La próxima semana: Superman en los cincuenta (2025), de Wayne Boring, Otto Binder, Al Plastino, y Curt Swan entre otros, en una década alocada por efecto de la censura.