¿A qué se debió el estruendo que ha causado alarma en la provincia de Huelva?
Los primeros en dar el aviso fueron los vecinos de la calle Margarita en la ciudad, aunque también algunos de la barriada de La Navidad, llegando incluso a escucharse en la zona de La Rábid
Dos guardias civiles salvan la vida a un herido que se desangraba en Matalascañas

La capital estuvo ayer en alerta tras escucharse un enorme estruendo a mediodía. Tal y como ha confirmado el servicio de Emergencias 112 Andalucía este sábado a Huelva Información, el sonido se escuchó alrededor de las 13:00. Los primeros en dar el aviso fueron los vecinos de la calle Margarita en la ciudad, aunque también algunos de la barriada de La Navidad, llegando incluso a escucharse en la zona de La Rábida.
En Twitter, algunos usuarios comentan que se escuchó además en la zona de Pescadería, La Ría y Plaza Niña. También se pudo sentir en Corrales, Gibraleón, Palos de la Frontera, Mazagón y San Bartolomé.
"Se escuchó como una explosión", relataban diversos ciudadanos a través de redes sociales. Pese a que el 112 dio aviso a Policía Nacional y Local, los agentes siguen sin saber la causa que originó tal ruido. Sobre lo ocurrido hay diversas teorías. Algunos piensan que, ciertamente, se trató de una explosión, mientras que otros onubenses apuntan a que pudo ser provocado por un avión al superar la barrera del sonido. Esto se denominaría 'boom sónico'. Se trataría del sonido provocado por cohetes espaciales o aviones rompiendo la barrera del sonido. Este efecto audible se produce cuando objetos como cohetes o algunos tipos de aviones atraviesan la barrera del sonido provocando una onda de choque conocida como explosión sónica, boom sónico, o estampido sónico. En ocasiones este fenómeno es visible en cohetes espaciales, pero es más común verlo en aviones supersónicos.
Aunque todos son teorías, esta no deja de ser la más original y sorprendente.
También te puede interesar
Lo último
Contenido ofrecido por Grupo Armas Trasmediterránea
Contenido ofrecido por Bodegas Emilio Moro