La estrella Polar fue guía de los antiguos navegantes. La astronomía vinculada a la navegación es la línea argumental de Las estrellas de Colón. Una noche diferente, una propuesta de Platalea consistente en un recorrido teatralizado por el Muelle de las Carabelas, conducido por el almirante Cristóbal Colón y el capitán de la Pinta, Martín Alonso Pinzón, interpretados por Diego Vázquez y David Herrero, de la empresa onubense de Educación ambiental e interpretación del Patrimonio. La iniciativa se enmarca en el convenio firmado entre la Diputación y Cepsa, cuyo objetivo es fomentar actividades en el enclave rabideño.

De la mano de Platalea los visitantes realizan un viaje en el tiempo a través de una ruta estructurada en dos partes. La primera, la más teatralizada, que transcurre en el barrio medieval, y la segunda, que tiene como escenario la réplica de la nao Santa María. La primera visita guiada por los espíritus de estos insignes marinos tuvo lugar la noche del pasado miércoles y se repetirá todos los miércoles hasta el 28 de agosto.

Los visitantes, que estaban sentados en las gradas del barrio medieval, fueron sorprendidos por Martín Alonso Pinzón. Las luces se apagaron de repente y entró en escena el capitán de la Pinta. Según la trama de la representación teatral, su espíritu, al igual que el de Colón, vaga por el Muelle de las Carabelas y le gusta rememorar la gesta descubridora. Siempre lo hace solo pero al ver al numeroso público asistente barajó la posibilidad de volver a tener a su mando una tripulación por lo que llamó a Cristóbal Colón, que hizo acto de presencia.

Para llevar a cabo su propósito, Martín Alonso Pinzón pidió voluntarios con el objetivo de poder revivir de nuevo la travesía. El personal seleccionado tuvo que pasar unas pruebas antes de embarcar.

Del barrio medieval, los visitantes, acompañados por el capitán de la Pinta y el almirante Cristóbal Colón, se dirigieron a la nao Santa María, en cuya cubierta les dieron nociones de seguridad naval y les enseñaron las partes de la embarcación para a continuación pasar al apartado de la navegación astronómica.

Todas las miradas se dirigieron al firmamento. La Polar es la referencia y a partir de ella, Vázquez, en su papel de Colón, hizo un recorrido por las constelaciones y estableció una comparativa entre el cielo que el almirante contempló en 1492 y el que observaron desde el Muelle de las Carabelas, no tan nítido debido a la contaminación lumínica. "Ahora se ve Saturno y también se vio aquel 3 de agosto, pero ahora está en la constelación de Virgo y entonces, en la de Capricornio". Complementando a Colón, David Herrero, metido en la piel de Martín Alonso Pinzón, contó la leyenda asociada a la Corona Boreal, que la mitología vincula con la corona de Ariadna.

La visita terminó, como no podía ser de otra manera con poesía, con la lectura de parte del poema Colón, de Ramón de Campoamor.