Huelva

Exigir espacios sin humo de tabaco nos hará más libres

Una mujer fumando.

Una mujer fumando. / H.I. (Huelva)

Los principios éticos del siglo XXI no son los mismo que los de los años 80 o 90. Las sociedades evolucionan y los ciudadanos que la componen también. Hemos mejorado mucho en la lucha contra el cáncer y hemos tomado conciencia de la importancia que tiene la alimentación, el ejercicio y los hábitos saludables. Sin embargo, hay determinadas herencias que aún conservamos del pasado y que es necesario erradicar.

No es extraño ver a gente fumando en lugares que está prohibido como los parques infantiles, terrazas o los alrededores de hospitales… y nadie dice nada. Sabemos de sobra que el humo del tabaco provoca cáncer, no sólo en los que fuman, también en los que lo respiran. Por eso es necesario extremar las medidas y poner remedio a esta situación injusta.

Especialmente peligrosa es la situación de los menores por ser los más vulnerables en la exposición al humo ambiental. Casi en el 100% de los espacios públicos donde acuden menores hay restos de humo ambiental del tabaco, lo que trae como consecuencia que éstos fumen sin encenderse un cigarro. Las cifras son claras, hoy en día 9 de cada 10 fumadores lo hace delante de menores, que se encuentran indefensos ante el humo del tabaco.

Actitudes permisivas favorecen que se normalice el consumo entre los jóvenes que comienzan a fumar a una edad temprana. A día de hoy, la media de inicio al consumo es de 14,1 años, una cifra alarmante que estamos obligados a frenar. La inhalación constante de tabaco aumenta el riesgo de desarrollar un cáncer o enfermedades cardiacas en la edad adulta: un 50% más de otitis, un 20% más de crisis asmáticas y un 30% más de infecciones respiratorias.

Los entornos completamente libres de humo de tabaco son el único medio probado para proteger adecuadamente frente a los efectos nocivos del tabaco, por lo que es indispensable incrementar estos espacios en beneficio de niños y jóvenes. Exponerles al tabaco, les predispone a futuras adicciones y pone en peligro su salud.

El objetivo perseguido por la Unión Europea es lograr una generación libre del tabaco para 2040 donde menos del 5% de la población fume, frente al 25% actual de prevalencia de consumo. Estas medidas deberán asimismo ser aplicadas a las nuevos derivados del tabaco y la nicotina, como los cigarrillos electrónicos, pipas de agua, cachimbas o sishas cuyo consumo está extendiéndose especialmente entre los más jóvenes.

El 31 de mayo se celebra el Día Mundial sin Tabaco y con este motivo la Asociación española contra el Cáncer solicita que no se permita fumar en espacios públicos donde haya menores y que se amplíe la Ley Antitabaco para que en 2022 los espacios sin humo sean ya una realidad.

Es necesario que todos nos convirtamos en activistas contra el tabaco y trabajemos en pro de los espacios libres de humo de tabaco . Sólo así lograremos nuestro objetivo de prevenir el 50 % de los casos de cáncer. Exigir que se aplique la Ley y llamar la atención de los que la incumplen, es necesario para poder alcanzar una generación libre de tabaco.

Súmate al Acuerdo Contra el Cáncer, desde AECC podemos además ayudarte a dejar de fumar con terapias presenciales y ponemos a tu disposición la aplicación para dejar de fumar RespirApp.

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