El plazo para la presentación de solicitudes de admisión para el próximo curso del 2º ciclo de Infantil, Primaria, ESO, Bachillerato y Educación Especial comienza hoy y permanecerá abierto hasta el próximo 31 de este mismo mes. En la provincia de Huelva se oferta un total de 94.733 plazas, 81.613 de ellas pertenecen a centros públicos y 13.120 a centros concertados, según datos de la Delegación de Educación. Esta cifra total para el 21/22 es ligeramente superior a las 94.305 plazas ofertadas para el curso vigente. Comienza por tanto el proceso de escolarización, en el que participan los niños que se incorporan al sistema educativo (de 3 a 6 años) y los alumnos que cambien de centro escolar.

El próximo año académico estará marcado por la adaptación a la nueva ley de educación, la Lomloe, a través del decreto de escolarización de la Consejería de Educación y Deporte. En este sentido, el comunicado de este departamento relativo precisamente a este proceso que arranca hoy, hace referencia a “la garantía de una oferta suficiente de plazas en el sistema educativo público andaluz en condiciones de igualdad para toda la ciudadanía”.

También, alude a la “demanda social”, sobre la que el propio consejero Javier Imbroda hizo referencia en su balance del primer trimestre escolar asegurando que estaría garantizada. Sin embargo, este concepto que aparecía en la norma anterior, ha sido eliminado en la Lomloe y este hecho ha sido una de las cuestiones que ha provocado una mayor rechazo en el sector de la concertada frente a la ley Celaá.

Entre las novedades, la Consejería destaca que por primera vez se han adscrito centros concertados que imparten Secundaria a centros tanto públicos como concertados que imparten Bachillerato. Esto supone que los alumnos no tendrán que someterse al proceso de admisión al tener garantizada una plaza en el centro de adscripción que les corresponda.

Dentro del funcionamiento de los centros públicos, será el Consejo Escolar el encargado de decidir en el procedimiento de admisión, una competencia que ejercía la dirección del centro. Este cambio también responde a la nueva normativa.

También hay elementos nuevos relativos a la puntuación y en este aspecto, la que se otorgaba por tener hermanos en el centro pasa de 20 a 14 puntos. Como explica la Consejería, la Lomloe limita este criterio al 30% del total. Estos mismos 14 puntos, el máximo, se obtienen por proximidad al domicilio dentro de su área de influencia. De este modo, Educación elude uno de los puntos del acuerdo alcanzado con Vox para el voto favorable a la investidura, ya que la formación defiende la libertad de elección de los padres y por tanto la eliminación de zonas educativas.

Si el domicilio del alumno se encuentra próximo pero en un área limítrofe, se otorgan diez puntos, al igual que la proximidad al lugar de trabajo, seis si es un área limítrofe al área de influencia. Algunos de los criterios que se mantienen para la puntuación son tener matriculado a un alumno en el primer ciclo de Infantil (un punto), expediente académico para Bachillerato (de dos a cinco puntos en función de la media), renta familiar (de 0,5 a cuatro puntos), discapacidad o trastorno del desarrollo (de dos a cuatro puntos), pertenencia a familia numerosa, monoparental o con dos hijos (de uno a 2,5 puntos).

La discapacidad sobrevenida durante el curso de cualquiera de los miembros de la unidad familiar se añade a los criterios de prioridad, como son, para la admisión, que el representante de un alumno trabaje en el centro donde se presente la solicitud, que los deportistas de rendimiento base puedan estudiar en un centro cercano al que entrenan, ser familiar de una persona víctima del terrorismo y los niños en acogimiento familiar.

Una vez que se cierre el plazo para la presentación de solicitudes, el 31 de marzo, comenzará un procedimiento que terminará el 11 de mayo, fecha en la que se publicará la relación definitiva de alumnos admitidos y no admitidos.