Los drones sobrevuelan la crisis

La firma onubense IPH presenta un novedoso proyecto de prototipos aéreos no tripulados con aplicaciones directas en minería y medio ambiente La tecnología local, a la vanguardia

Prototipo de dron de la empresa onubense IPH, desarrollado a través del proyecto Samba, en un vuelo de demostración, ayer, en el Muelle Sur.
Prototipo de dron de la empresa onubense IPH, desarrollado a través del proyecto Samba, en un vuelo de demostración, ayer, en el Muelle Sur.
Javier Ronchel Huelva

01 de febrero 2014 - 01:00

Huelva es mucho más que jamón, gambas, playas y viejas tradiciones. Incluso más que industria, minería y agricultura. La muestra, la tecnología con marchamo onubense que se abre paso en plena crisis para vislumbrar una vía alternativa de desarrollo. El impulso viene desde la Universidad, a través de sus grupos de investigación y la formación de jóvenes cada vez más cualificados. Un grupo de estos son los que están al frente de IPH, empresa de ingeniería enfocada a la geodesia y su aplicación a sectores como la minería. Suyo es un proyecto pionero, Samba, que integra el uso de aviones no tripulados en sus análisis sobre el terreno. Mientras llegan los del Inta, los drones sobrevuelan ya la provincia de Huelva para darle un impulso a su economía.

Con un prototipo de ocho hélices, equipado con tecnología desarrollada desde sus instalaciones de la capital onubense, los ingenieros de IPH son capaces de recoger muestras precisas en terrenos de difícil acceso para el hombre o que entrañan un riesgo añadido. Más allá, pueden tomar imágenes termográficas, fotografías y vídeos, en vuelos de baja altura (de hasta 300 metros) y en entornos tan variados como la chimenea de una industria, una mina o una balsa de residuos minerales o químicos.

"Ha costado mucho llegar hasta aquí", reconoce Emilia Martín, ingeniera de telecomunicaciones en el equipo de IPH. "Es un proyecto de investigación que tiene detrás muchas horas de estudio, de planificaciones, de vuelos y hasta de siniestros. Y seguimos en ello. Esto es un trabajo continuo".

La empresa onubense presentó ayer en Huelva el proyecto Samba (Sensorización Aérea Multiespectral a Baja Altura) al consejero de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta de Andalucía, José Sánchez Maldonado. Su departamento, a través de la agencia Idea, ha participado en su desarrollo con un incentivo de 107.550 euros. El presupuesto total, cifrado en 550.000 euros, ha contado también con la participación del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio y con fondos Feder de la Unión Europea. Después de dos años de desarrollo, ayer se hizo su presentación oficial con la vista puesta en el mercado, no sólo provincial, sino también nacional e internacional.

"Este proyecto -dijo el consejero- pone de manifiesto que el conocimiento en Andalucía, y el esfuerzo universitario que se ha hecho en este sentido estos últimos años, da sus frutos. Estoy plenamente satisfecho y le doy la enhorabuena a este grupo de ingenieros andaluces por este magnífico resultado que, creo, les va a servir para poner en marcha una actividad productiva muy importante en el campo de las nuevas tecnologías", apostilló Sánchez Maldonado.

Tratándose de aeronaves no tripuladas, no podía pasar por alto el gran proyecto tecnológico que se desarrollará en Huelva, Ceus, y su centro en las instalaciones del Arenosillo. "Huelva está aumentando su protagonismo en el campo de la tecnología UAV [aviones no tripulados], como demuestra el proyecto de la empresa IPH, y también se manifiesta con el proyecto Ceus", apuntó el consejero de Innovación y Ciencia. Aunque no tiene una relación directa con él, el proyecto Samba de IPH no cierra las puertas a una posible colaboración futura: "A ver lo que puede surgir. Nosotros estamos abiertos a todo", señaló Emilia Martín.

A su favor cuenta el hecho de que el desarrollo de los prototipos haya sido realizado totalmente en la empresa onubense. Suya es la investigación y la tecnología aplicada. Y también la construcción de las aeronaves. "No puede haber ninguna igual porque nosotros hemos realizado la integración con dispositivos electrónicos diferentes. El chasis también lo hemos diseñado, e incluso algunas partes las hemos fabricado con una impresora 3D", contó la ingeniera.

Con una plantilla de 35 personas, Samba ha sido desarrollado por seis, dos de ellas en puestos creados expresamente durante los dos años de trabajo, por lo que el impacto en el empleo, sin grandes cifras, también es evidente.

"Estamos radicados en Huelva. Tenemos nuestras oficinas en la calle Plus Ultra y las pruebas de los prototipos las hemos hecho en el campo de vuelo situado junto al Parque Científico y Tecnológico de Aljaraque. Estamos centrados aquí pero nuestra idea es llevar nuestros servicios también fuera", explicó Emilia Martín. En el horizonte, los proyectos mineros de la provincia. "Hemos trabajado y trabajamos muchísimo con el sector. Estamos abiertos a todo", afirmó. Es su forma de sobrevolar la crisis.

stats