Huelva de ayer a hoy

Un destino artístico para reciclar los árboles caídos por la borrasca 'Bernard'

  • Algo más que biomasa. El final debería ser un fin social, para ONG’s que lo conviertan en objetos de arte; incluso para decorar algunos espacios como El Conquero

Un eucalipto centenario venido por el viento sobre la tapia del San Pablo.

Un eucalipto centenario venido por el viento sobre la tapia del San Pablo. / Eduardo Sugrañes

EL temporal provocado por la borrasca ‘Bernard’ ha dejado un reguero de desolación en la ciudad; nada que contarles que no hayan sufrido ustedes. La arboleda resultó la más castigadas y hemos visto cómo ejemplares de todas las características, de especie, tamaño y edad tumbados por el viento, arrancando el acerado o todo aquello donde se encontraban.

Tenía escrita esta entrega dominical cuando se tuvo que talar la alta palmera de la Plaza Quintero Báez, la incertidumbre sobre su posibilidad de caída y el peligro que ello conllevaba hizo tomar esta decisión. De los 500 árboles que dicen los datos oficiales del Ayuntamiento solo sabemos de una palmera muy alta e igualmente centenaria de la Plaza de la Merced que se vio quebrada por el temporal. La flexibilidad de esto ejemplares les da para ‘jugar’ con el viento.

Con más de un metro y medio de diámetro en el tronco fue arrancado del suelo. Con más de un metro y medio de diámetro en el tronco fue arrancado del suelo.

Con más de un metro y medio de diámetro en el tronco fue arrancado del suelo. / Eduardo Sugrañes

En el cementerio hablan de unos sesenta árboles caídos; vemos a los cipreses tendidos sobre las calles del frío adoquín cuando deberían estar con sus agujas tocando al cielo y más en estos días de recuerdo a los fieles difuntos.

En otro tiempo los cipreses caídos en el cementerio tuvieron un uso muy digno, sirvieron al escultor Antonio León Ortega para tallar imágenes para nuestra Semana Santa. Eran los años cuarenta del siglo pasado, tiempo de carestía y de mucha imaginación para sobrevivir en todos los órdenes de la vida.

Un portentoso árbol caido en el solar del antiguo Mnauel Lois. Un portentoso árbol caido en el solar del antiguo Mnauel Lois.

Un portentoso árbol caido en el solar del antiguo Mnauel Lois. / Eduardo Sugrañes

La caída de muchos árboles nos ha sorprendido, sin duda alguna los de mayor porte y antigüedad. El gran abeto del solar del Manuel Lois, que está ahí desde que se abrió el hospital en los años cuarenta.Sin duda de los que más sorprendieron es uno de los eucaliptos centenarios del paseo del Conquero a la altura del antiguo Colegio Mayor San Pablo. Con cerca de un metro y medio de diámetro y una altura considerable el viento lo arrancó de cuajo del suelo y acabó tendido sobre la tapia del centro que ahora se prepara para una residencia de mayores.

Hya quienes los decoran, esta podría ser una forma de reciclado para muchos ejemplares de gran belleza caídos por el temporal. Hya quienes los decoran, esta podría ser una forma de reciclado para muchos ejemplares de gran belleza caídos por el temporal.

Hya quienes los decoran, esta podría ser una forma de reciclado para muchos ejemplares de gran belleza caídos por el temporal. / Eduardo Sugrañes

Algunos árboles que solo se han inclinado quizás puedan superar estos efectos con un testigo.

Echaremos de menos estos árboles, lo que no sabemos es si algunos ejemplares de gran porte, que han ido significativo para nuestra ciudad, como este centenario eucalipto su tronco pudiera recuperarse y quedar en alguna de las laderas del Conquero. Hay incluso quienes los pinta.

La replantación debería convertirse en un Día del Árbol para los escolares onubenses

Los árboles y ramas caídas se acumulan en el recinto colombino, esperan su reciclado, algunos podrían servir para calentar a familias vulnerables, otros de decoración y algunos convertidos en objetos de venta por ONG’s.

Para ser algo más que biomasa.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios