La demanda en Cualificación Profesional incrementará los grupos para el curso 2010/11

Parece que la terrible crisis económica que padecemos acabará con la conocida generación 'ni-ni', es decir, la constituida por aquellos jóvenes que ni estudian ni trabajan. Como lo de trabajar está muy complicado, los chavales van optando por la formación para abrirse un hueco en el casi inexistente mercado laboral. Prueba de esta afirmación se encuentra en el impulso que han experimentado los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI) que se han hecho un espacio en la oferta de la Consejería de Educación.

En este curso 2009/10 se experimentó un incremento de su alumnado en cerca del 60%. De hecho en estos momentos, están realizando algún programa de esta índole, un total de 964 alumnos. En el presente curso, los PCPI se imparten en 27 centros y se ofertaron 13 módulos. Desde la Delegación Provincial de Educación se informó de que para el curso 2010/11 se mantendrá la misma oferta formativa aunque se incrementará el número de grupos que pasarán de 35 actuales, a 41 lo que deja meridianamente claro que en el 2010/11 se rebasará con facilidad, el millar de estudiantes. Los que más tirón seguirán teniendo son los de Ayudante de fontanería y calefacción-climatización, Auxiliar de instalaciones electrotécnicas y de comunicaciones y Auxiliar de gestión administrativa.

El colegio Cristo Sacerdote perteneciente a los Salesianos, es testigo del aumento en el interés de los jóvenes por estos programas. Cristo Sacerdote es uno de los tres centros concertados que trabajan con Educación, en la provincia. Su subdirector Juan Fernando Martínez Moreno confirmó que para el curso 2010/11 se ha ofertado un total de 42 plazas habiéndose recibido 108 solicitudes. Ese aumento de demanda se ha evidenciado también en la oferta de Formación Profesional; pero ciñéndonos a los PCPI, Cristo Sacerdote incluye tres cursos: Auxiliar de mantenimiento de vehículos, Ayudante de fontanería y calefacción-climatización y auxiliar de gestión administrativa, siendo el que cuenta con más alumnos, Auxiliar de mantenimiento de vehículos.

El subdirector explicó que "el perfil de los chavales que se animan a realizar un PCPI es el de aquellos que han terminado la ESO sin haber obtenido el graduado -es decir con una edad mínima de 16 años- o bien con 15 años se les autorice a terminar la ESO a través de los PCPI.

La experiencia, al menos en lo que respecta a Cristo Sacerdote, perteneciente a los Salesianos, es altamente satisfactoria ya que el 90% de los alumnos termina el programa. Al 10% restante se le intenta buscar otra alternativa. Así se pone en marcha lo que Martínez Moreno define como acompañamiento que se realiza con la colaboración de la familia del chaval, aunque para esto es imprescindible la buena voluntad del interesado. Cuando el PCPI ha fallado, hay dos alternativas: la Formación Profesional para el Empleo (FPE), que se realiza en colaboración con la delegación Provincial de Empleo: "Estos cursos son más prácticos y tienen menos horas de aula que los de Cualificación Profesional". Junto a la FPE, está la ejecución de un itinerario de desarrollo personal para el que "tenemos un equipo de orientación". A los chicos que optan por esta segunda opción se les ofertan ciclos adaptados.

Para el subdirector del colegio Cristo Sacerdote, "los PCPI son una herramienta muy válida aunque es necesario que cada centro la contextualice conforme a las necesidades de sus alumnos".

Los PCPI tomaron en el curso 2008/09 el relevo del Programa de Garantía Social y surgieron como un plan de choque para abordar el fracaso escolar de la Enseñanza Secundaria. Los módulos que experimentan incremento de grupos para el curso 2010/11 son los de Auxiliar informático, Ayudante de cocina, Auxiliar de carpintería y auxiliar de servicios de restauración. Cada grupo constará de un máximo de 20 alumnos.

El acceso a los PCPI es para chavales entre 16 y 21 años y de manera excepcional con 15 años. No tienen el título de ESO y no están en condiciones de conseguirlo. Tampoco cuentan con titulación alguna en Formación Profesional y están amenazados de riesgo de abandono escolar o se encuentran ya desescolarizados.

Los que no opten por el segundo año del PCPI, que tiene carácter voluntario y está encaminado a obtener el graduado en ESO, reciben la Certificación de las Capacidades Profesionales Adquiridas, que al menos les concede alguna acreditación profesional, lo que para las empresas es ya a estas alturas, un aspecto imprescindible.