La crisis provoca el cierre de la tienda de Idea en Huelva

El sector de electrodomésticos sigue dando muestras de agotamiento por la crisis. La próxima víctima en Huelva será el establecimiento que la cadena Idea tiene en la capital, en el que actualmente trabajan diez empleados, que cerrará definitivamente sus puertas después de vender el stock que tiene acumulado en sus instalaciones, según han confirmado fuentes cercanas a la empresa.

Prometheus Electronic, firma propietaria de las marcas Master Cadena e Idea Electrodomésticos, presentó el año pasado concurso voluntario de acreedores (antigua suspensión de pagos), ante el deterioro de la situación que atraviesa el sector, si bien los establecimientos de la zona occidental de Andalucía, entre los que se encuentra el de Huelva, no estaban incluidos en ese expediente, que fue aceptado por el Juzgado en octubre del año pasado. Finalmente, el establecimiento de Huelva que, según denuncian los trabajadores, no recibe mercancía desde el verano, cerrará sus puertas, aunque no hay fecha concreta para ello. "No sabemos el día, pero será cuando se liquide todo el material que hay en el almacén", confirmaba el representante de CCOO en el sector, Manuel Salas, quien asegura que el cierre de Idea en nuestra capital "ha sido la crónica de una muerte anunciada".

Ayer fue el primer día en el que se iba a comenzar a liquidar esos productos y desde primera hora de la mañana el centro se convirtió en punto de encuentro de multitud de onubenses en busca de una ganga. Una circunstancia que superó las previsiones (el establecimiento no había hecho pública su intención de vender la mercancía existente un 60% por debajo de su precio) e impidió que se abrieran las puertas durante la mañana. "Ha sido imposible abrir hasta que dispusiéramos de personal de seguridad", explicó una dependienta, que confirmó que las puertas no se abrieron al público hasta las seis de la tarde.

El sector de electrodomésticos fue uno de los primeros que arrastró la crisis de la construcción, llegando a registrar los primeros descensos significativos en las ventas en marzo del año pasado. Una situación que conoce bien el empresario onubense Emilio Borrego, que cuenta con tres establecimientos en Ayamonte. En su opinión, no sólo la recesión del consumo está afectando al sector, sino que a ella se suma el descenso en los precios de los productos en el mercado, lo que "inevitablemente" provoca el descenso de productividad: "Es muy difícil vender a precios más bajos y mantener la productividad", explica; si bien entiende que "el empresario debe trabajar más y hacer muy bien las cuentas para saber hasta dónde puede llegar.