Las consecuencias de las llegada del coronavirus y todo lo que conlleva se traducen en una terrible crisis económica que ha obligado a muchas familias a pedir ayudas a diferentes ONGs asistenciales. Este es el caso de Cáritas Diocesana, entidad que ha visto en los últimos meses evolucionar el perfil de los usuarios hasta la situación que están viviendo actualmente, en la que las familias son las grandes protagonistas de las ayudas.

Tal y como explican desde Cáritas Huelva, los Ertes y los despidos, además de otras circunstancias, han provocado que el número de familias en situación de emergencia crezca exponencialmente, “hasta el punto de que ahora quizás sean los que más demandan nuestras ayudas, por encima de las personas sin hogar”.

En este sentido, y en plena ola de frío, continúan desde la entidad, “la pobreza energética acecha a numerosas familias onubenses que han visto mermados, o en muchos casos desaparecidos, casi todos sus ingresos así que toda ayuda es bien recibida”.

Ante esta situación, la Junta de Andalucía ha presentado una ayuda de urgencia concedida a la entidad por valor de más de 2 millones de euros (2.050.000), para la atención a familias vulnerables afectadas por la pandemia de Covid-19. De este total, la parte proporcional que esta subvención excepcional tiene destinado específicamente en la provincia de Huelva es de 123.856 euros.

El anuncio de esta ayuda fue realizado ayer por la consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, durante su visita a la sede de Cáritas Diocesana en Huelva. Así, Ruiz ha asegurado que “desde el primer momento de esta crisis sanitaria y con el objetivo de frenar las consecuencias económicas y sociales del Covid-19, estamos trabajando en ofrecer una salida rápida, ágil y eficaz porque las personas que peor lo están pasando no pueden esperar ni sufrir la burocracia y la lentitud que arrastra la Administración”.

Según ha concretado la consejera, con esta subvención, “Cáritas va a desarrollar en toda Andalucía un programa extraordinario de ayuda en materia de necesidades básicas destinado a población en situación de vulnerabilidad y/o exclusión social por el Covid-19 para el acceso a productos y servicios relaciona-dos con la vivienda, la salud, la educación, la reducción de la brecha digital y otras carencias de primer orden. Para ello, el plazo de ejecución está comprendido entre el 1 de enero y el 30 de septiembre de 2021”.

Este programa se articulará a través de una acogida y atención individualizada en las familias, un diagnóstico de las situaciones personales y familiares, la gestión y entrega de ayudas directas, la derivación acompañada a recursos públicos y privados, un seguimiento personalizado, orientación personal y familiar y coordinación del voluntariado.

Las ayudas podrán ser de tipo material, en equipamiento y económicas e irán destinadas a gastos como los relativos a suministros de la vivienda, alquiler, material informático y escolar, servicios escolares (aula matinal, comedor, aula de mediodía, etcétera), gastos de transporte, material farmacéutico, óptica, ortopedia, odontología, etc. 

En total, la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación ha destinado de forma urgente 8,3 millones de euros para atender las necesidades básicas de población vulnerable. Además de la subvención concedida a Cáritas Diocesana, el departamento de Rocío Ruiz ha concedido otra ayuda de carácter excepcional a la Red de Lucha contra la Pobreza (EAPN) de casi 3 millones de euros. Así como a la Federación de Banco de Alimentos por valor de 3,3 millones de euros, que se suma a la que ya se le concedió en el mes de abril de 1 millón de euros.

Durante la visita, la consejera ha estado acompañada por el director general de Servicios Sociales de la Consejería, Francisco José Vidal, y el presidente de Cáritas Andalucía, Mariano Pérez de Ayala, con quien se ha reunido para seguir trabajando en nuevas vías de colaboración con la Administración andaluza.

Cáritas Andalucía cuenta con más de 50 años de acción continuada, donde se atiende a personas y familias que se encuentran en situación de pobreza y vulnerabilidad social.