Cortegana y Zufre dan lustre a este sábado taurino en Huelva

En Zufre hay toros esta tarde. En Zufre y en Cortegana. Vaya dos plazas con solera. Esa casualidad del aprieto que provoca estas fechas septembrinas de vírgenes y tradiciones hace inevitable esta circunstancia cuando ya el calendario va dejando rastros de mucha actividad taurina y no hay más remedio que elegir

En Cortegana, cartel de banderilleros. Se supone que con tirón suficiente como para ponerle buena entrada a la plaza serrana.

Cartel con fundamento y como diría el maestro Argiñano “rico, rico”. Rico en oficio, veteranía y torería. Ferrera con los puntos aun frescos de su cornada en Bayona pero con su torería intacta. Fandi con la veteranía y la importancia de su oficio y nombre en cartel de tal índole y Escribano en esa fortaleza que da el triunfo y la decisión para lidiar con cualquier oponente. Es un cartel de mucho público y con ese adobo tan especial que le ponen los toros de Sobral una divisa cuyo nombre en nuestra provincia salió proyectado como triunfador de temporada precisamente tras una gran corrida lidiada en Cortegana.

Zufre

Es Zufre parte vital de esta Huelva taurina. Vital por lo que supone volver a vestir un cartel con nombres toreros sobre la historia de esa plaza que tantas tardes bonitas le ha dejado a la historia de la tauromaquia de nuestra provincia.

Y sobre la tarde un nombre muy especial, al menos para quien firma estas líneas, como es el de Emilio Silvera. No me equivocaré mucho si digo que desde su actuación en tierras peruanas de Ayaviri en septiembre de 2024 donde se hizo con el Escapulario de Oro puesto en liza en la feria a Emilio no le ha dado oportunidad ningún cartel de enseñar su toreo. Es una buena oportunidad esta tarde aunque sea en formato festival ver la evolución de un torero al que le ha pasado por encima un parón ingrato e inmerecido.

El cartel lo componen el rejoneador local El Panita, triunfador el pasado año en estos lares. Junto a él hacen el paseíllo el diestro algecireño Salvador Barberán, El Calita, y el novillero Mariscal Ruiz frente a cinco novillos de Gabriel Rojas.