El conductor que desató el accidente del Recre denuncia ahora por daños

El conductor del camión con el que chocó brutalmente el autobús de seguidores del Recreativo en la noche del 20 de diciembre de 2006, un accidente en el que murieron cuatro personas y otras 35 resultaron heridas (hubo una quinta víctima en los meses posteriores que no logró sobrevivir), pide ahora responsabilidades por el siniestro.

Un año y medio después de la tragedia que sacudió a los aficionados del Decano, este diario ha sabido que el conductor del camión, cuya identidad es A. P. L., ha presentado una denuncia por daños y lesiones ante el Juzgado de Instrucción número 1 de La Palma del Condado, encargado del caso. El conductor del trailer solicita que se condene "a las personas responsables", al tiempo que reclama una indemnización por los daños que sufrió en el choque.

El denunciante, un ciudadano de origen brasileño nacionalizado en Portugal, circulaba a más velocidad de la permitida en el momento del accidente, no había respetado los tiempos de descanso en una jornada agotadora al volante y, también según el informe realizado por el grupo de especialistas de Inspección de los Transportes Terrestres de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, era plenamente consciente de que el tacógrafo del vehículo estaba manipulado, supuestamente por la empresa propietaria, la firma gallega Centro Comercial Ibáñez S. L..

La manipulación del tacógrafo del trailer es una de las principales conclusiones del informe de los expertos de la Guardia Civil, del que se encargó una ampliación para afinar en las causas (y distintas responsabilidades) del accidente, en el que se produjo una concatenación de circunstancias hasta que el autobús de seguidores del Recreativo chocó violentamente con el trailer, que se encontraba volcado en mitad de la A-49 después de haber sufrido un accidente anterior.

El informe ampliatorio, al que ha tenido acceso este diario, viene a confirmar que el chófer del autocar en el que viajaban los aficionados del Recre tuvo alguna "distracción o desatención" en la conducción, ya que no frenó ni realizó ninguna maniobra evasiva para evitar el brutal golpe con el camión. "Tras observar a varios vehículos parados en el arcén derecho con la luz de avería conectada y a varios usuarios con chalecos reflectantes haciendo señales, el conductor creyó que le estaban advirtiendo de algún peligro en el margen derecho de la vía y se desplazó al carril izquierdo, no percatándose de que el camión estaba volcado en la calzada".

Precisamente, siempre según el informe, el origen de la referida desatención es que el conductor del autocar "se distrajo al quedarse mirando al lado derecho de la vía, con la curiosidad de saber que es lo que pasaba, sin imaginar que el peligro estaba delante suya".

El documento hila más fino en su reelaboración y da algunas respuestas más. Respecto al tiempo mínimo transcurrido entre el vuelco del trailer y la llegada del autocar al mismo punto, señala que transcurrieron aproximadamente cinco minutos en función de la información que aporta el disco que portaba el tacógrafo del tracto-camión, y precisa además que el camión podía verse a unos 30 o 40 metros de distancia. Sin embargo, los expertos de Tráfico consideran que sí se podía apreciar desde una larga distancia los vehículos parados en el arcén derecho (con la luz de avería conectada) y los usuarios haciendo señales, que sí llegaron a ser vistos por el chófer del autobús.

Al menos seis vehículos, con sus ocupantes, llegaron antes que el autocar al punto en el que se produjo el vuelco del camión e incluso, según los testigos, varios más (incluido uno de grandes dimensiones) que prosiguieron su marcha o no pudieron llegar a ser identificados y dos de estos vehículos habían adelantado minutos antes al autobús en el que viajaban los seguidores del Recreativo. Según los testigos, estos coches se detuvieron o aminoraron la velocidad que llevaban.