La clausura de la planta preocupa a las industrias

Otro de los caballos de batalla y continuo foco de polémica en la gestión de residuos tóxicos y peligrosos en Huelva es su vistoso transporte por carretera. A diario, un mínimo de 50 vehículos surcan las vías de Huelva con destino al los depósitos de seguridad ubicados en Nerva. Los vertidos se han producido principalmente en la Nacional 435, incluido un siniestro que obligó a evacuar a varias familias de la aldea de Aguafría, y en las vías secundarias de la Cuenca Minera, El presidente de Befesa presume de que en catorce años y después de 200.000 movimientos de cargas de residuos el índice de siniestralidad se reduce al 0,007% (15).

-¿El transporte de residuos tóxicos por carretera, destapados y a granel, es el más conveniente y seguro?

-La Unión Europea marca unas directrices y esas normas son las que se aplican en toda España. No se puede pretender que solamente los transportes de residuos a Nerva se realicen con otras exigencias y parámetros, iría en contra de la libre competencia y causaría graves perjuicios a la empresa. Aun así en estos casi 14 años de vida de la instalación onubense se han realizado 220.000 movimientos de camiones con una mínima incidencia de siniestros, el 0,007%. Cuando hemos pedido opinión a los expertos en la materia para estudiar la viabilidad de redactar y ejecutar un plan especial para Nerva nos han dicho que no es necesario pues el índice de siniestros es muy bajo. En Nerva se exagera. Ayer mismo (por el martes) estuvo la Autovía de la Plata (A-66) cortada durante 30 horas por un vertido de residuos tóxicos y ni la organización Ecologistas en Acción ni Greenpeace pusieron el foco en el accidente. Creo que se necesita más objetividad.

-¿La clausura del vertedero industrial de Zarandas conlleva daños colaterales para las industrias andaluzas?

-Si dura los quince días que ha marcado la Junta de Andalucía originará daños limitados. Las industrias de Huelva, Sevilla o Cádiz están almacenando esos residuos, algunas están alquilando instalaciones especiales y en muchas existe preocupación por el futuro. El levantamiento de la medida cautelar es fundamental para las industrias andaluzas que usan las instalaciones de Nerva y en eso se incluye el mantenimiento de muchos puestos de trabajo.

-¿Influye la nueva situación política del Ayuntamiento de Nerva, sin mayoría absoluta, en el funcionamiento de la planta?

-Befesa gestiona tres millones de toneladas de residuos al año en toda Europa, en Gran Bretaña, Alemania, Francia o Suecia. Se dan situaciones políticas de todo tipo y nuestra gestión sólo obedece a la legislación y al cumplimiento de los estándares de garantía y calidad internos y externos. De ninguna manera puede afectar la situación política al funcionamiento. Nos da igual, por tanto, la situación política.

-¿Ha pedido Befesa ampliar la planta de Nerva y por tanto alargar la vida útil del centro?

-La empresa lo único que pretende, tal y como se estipula en la Autorización Ambiental Integrada de 2008, es poder ejecutar unas obras previstas inicialmente. Y eso es lo que hemos solicitado. ¿La obra amplía la duración? Eso lo marcará el tipo de residuo, la densidad. La AAI contempla lo apuntado en el proyecto original, un recrecido en superficie de 5 metros. La vocación de Befesa es utilizar al máximo la planta, tenemos nuestro derecho y nuestra obligación como empresarios pues la planta también garantiza el funcionamiento óptimo y responsable de muchas empresas andaluzas y las zonas fabriles más importantes de Huelva y Andalucía.

-Ha notado cierta hostilidad de los responsables andaluces de Medio Ambiente en las relaciones con Befesa desde los últimos incidentes?

-El comportamiento de la Consejería siempre ha sido de absoluta profesionalidad, más allá de los incidentes habidos.